José Juan Romero: una vida entre banquillos

En un pueblecito de Sevilla, concretamente en Gerena, nació José Juan Romero en torno a una familia donde la pasión por el fútbol era casi hereditaria, tanto que el propio Romero se atrevió a decir que nacieron “con un balón”. A día de hoy todos conocen a José Juan Romero por su faceta de entrenador en Ceuta. Pero antes de llegar hasta ahí, él también estuvo en el barro, llegando incluso a debutar en Segunda B.

Como todo, sus comienzos fueron en Gerena, pero conforme iba creciendo “iba moviéndome por varios pueblos de allí por las últimas categorías”. Así, hasta que el Tomares decidió ficharlo para jugar en Tercera División, “donde estuve varios años”. Pero no solo el Tomares pudo disfrutar de los servicios de JJ Romero, sino que también lo hicieron el Cerro y el Dos Hermanas.

Romero define aquellos años como “mucho mejores y más divertidos que la faceta de entrenador”. En aquel momento no tenía en cuenta “la repercusión que tiene el entrenador en un banquillo”, puesto que en aquel momento era “salir, divertirse y entrenar”. Algo que a día de hoy “recomiendo a mis hijos”.

A pesar de su empeño por no querer salir de los terrenos de juego, las lesiones comenzaron a truncar la carrera deportiva de Romero. “Terminé tirando un penalti. Ahí me rompí y decidí que me retiraba”, comentó.

En ese momento JJ Romero volvió a Gerena y como no quería desvincularse del mundo del fútbol, “decidí crear un equipo senior en Gerena. Comenzamos los entrenamientos y me tuve que sacar las titulaciones. No me quería sacar el nivel 3 porque no quería ir más allá, pero me obligaron a ello y me enganché a esto”.

De nuevo fue en Gerena donde partió este camino como entrenador. En ese mismo club estaría durante siete u ocho temporadas aproximadamente, de las cuales en seis consiguió el ascenso.

Pero en febrero de 2016 hubo una llamada que le permitiría a JJ Romero ir más allá. El Real Betis Balompié fichaba al de Gerena para dirigir al filial. “Imagínate. Bético desde la cuna y que el Betis te llame. Fue un momento mágico porque era algo que para mí era impensable”, añadió.

Para el de Gerena fueron unos años especiales, “de la noche a la mañana te ves allí en la Ciudad Deportiva del Betis tratando con un club profesional. Fueron años muy bonitos”.

JJ Romero y el Betis decidieron separar caminos y fue entonces cuando llega la llamada del Ceuta, “en concreto la persona de Luhay”. Fueron días duros, “hasta las dos de la mañana estábamos hablando”, pero finalmente “no me preguntes cómo, me trajo”.

A día de hoy la relación con el presidente del club “va más allá de lo deportivo”. Todos ello a raíz de las dos temporadas que Romero estuvo al cargo del Ceuta, donde hubo “muchos momentos en los que o la relación se estrechaba e íbamos a muerte, o hubiera sido imposible”. Luhay Hamido supo estar presente “en los momentos de debilidad. Al final me fui pero seguía estando aquí. Ya no hablo solo de Luhay, hablo de otras muchas personas, porque al final lo que tienes aquí en Ceuta son amigos”, comentó Romero.

Ascensos de la AD Ceuta

El segundo año de JJ Romero con las riendas de la AD Ceuta lo denomina como “una locura”, pero será un año que siempre recordará. “Diré aquí y siempre que nada se podrá parecer a aquello. Al año siguiente subo con el Eldense o la propia machada histórica del Elche o el Ibiza son muy bonitas, pero nada llega al día de Jerez o de Lucena. Aquello me va a marcar siempre como entrenador. Nada podrá equipararse con lo que aquello significó y lo difícil que era por cómo llegábamos”, señaló.

Al siguiente año, JJ Romero pasa a dirigir las filas del Eldense. Pero por casualidades de la vida, la Agrupación Deportiva Ceuta asciende también a Primera RFEF, “no sé todavía cómo se pueden dar tantas circunstancias. Que me vaya allí, subamos nosotros y al día siguientes suba el Ceuta en el mismo campo”.

El técnico definió este momento como algo que “fue maravilloso. Esto es de las cosas buenas que nos da este deporte”.

De nuevo, técnico del Ceuta

El Ceuta comenzó su competición liguera el pasado mes de agosto. Las cosas no comenzaron de la mejor forma, puesto que los tres primeros encuentros se disputaron fuera de casa. En la cuarta jornada se registró la cuarta derrota del equipo ceutí y en ese momento la entidad decidió, de mutuo acuerdo, separar caminos con el anterior entrenador. Pocos días después se anunció la vuelta de JJ Romero. “No había manera de que si el Ceuta me necesitaba, iba a venir”.

Después de estar en Elda, “necesitaba un descanso”, pero una vez que lo llama el Ceuta, “tenía que venir”. Ante esta decisión, Romero no se siente “arrepentido por nada”, puesto que “es uno de los equipos míos que mejor está jugando. Es verdad que cuando entras en dinámica de miedo y nervios es muy complicado, pero eso ha sido así desde el principio. Encima le añadimos esa pizca de fortuna que se suele tener y pedimos que nos acompañe. No estamos teniendo suerte tampoco en la labor arbitral”. Pero a pesar de que “en Ceuta todos los retos se me vuelven más complicados”, JJ Romero tiene claro que “no vamos a rendirnos”.

El fútbol para él

Como entrenador, JJ Romero se define como “un amante de los futbolistas”. Sus motivos son: “Primero porque adoro el fútbol, segundo porque no entiendo el fútbol sin divertirme y después porque para mí los protagonistas y los dueños de este deporte son los futbolistas”. Para él como entrenador “es menos importante que digan que soy malo o bueno como entrenador a mala persona”.

En cuanto a lo que significa el fútbol para él, JJ Romero no duda en decir que es su vida. “Les da mucho coraje cuando digo que si me quitan el fútbol me quitan la vida, pero es la realidad”. El técnico tiene claro que conforme llegas a una edad, “hay otros parámetros”, pero el día en el que no hay fútbol “o no tengo algo relacionado con mi amigo el balón” se aburre. Es por ello que, para concluir, JJ Romero dejó claro que “quien quiera acabar conmigo, que acabe con el fútbol”.