Ya están en Ceuta, con sus familias y en la ciudad en la que prestan servicio. Tras varios meses de misión en Irak, el segundo grupo de
militares ceutíes que realizó esta misión internacional ha llegado este jueves por la tarde al puerto tras coger un barco desde Algeciras, a donde han llegado esta mañana
tras el viaje desde Irak a Málaga. Han sido recibidos con los mejores honores: sus familias y amigos. Se han vivido momentos de mucha emoción en la
Estación Marítima, a donde también miembros de la
Comgeceu han acudido a recibirles. Padres que hacen meses que no ven físicamente a sus hijos, las lágrimas de felicidad de una madre y parejas que ya no tendrán que mantener más el contacto en la distancia. Un total de 94 han sido los que han regresado, pertenecientes a distintas unidades de la Comandancia General de Ceuta, pero sobre todo han sido
regulares y
legionarios.
Su jefe, el comandante Sergio Villaescusa, ha atendido a los medios de comunicación para hablar principalmente de la eficacia de la
preparación realizada para este tipo de misiones (en las instalaciones de instrucción y adiestramiento de la Comgeceu y en los campos de maniobras y tiro de Córdoba y Almería), del contacto y el apoyo recibido por las familias y de los planes de futuro inmediato. “Todo ha ido bien. Sobre todo misión cumplida que es lo importante y hemos tenido mucho compañerismo que es vital cuando se tiene la familia tan lejos”, ha señalado.
Villaescusa también ha señalado que se ha sentido emocionado tras el recibimiento de los familiares. “Son un pilar fundamental, los que más sufren nuestra ausencia, y se les echa mucho de menos. Llevo 14 años destinado aquí en la ciudad y este momento es indescriptible”. Por último, entre risas, el jefe del contingente quiso señalar que le ha traído “un osito de peluche” a su hijo de recuerdo en esta misión.