Cuando hablamos de inseguridad nos vemos obligados a hacer una profunda reflexión y analizar sus causas. La inseguridad es un malestar generalizado en la sociedad. Existen múltiples razones para explicar los altos índices de inseguridad. La marginalidad, la no recepción de política pública, la quiebra en las familias, menores ejerciendo la mendicidad, seres desesperados que solo esperan que alguien les saque del pozo, bajo nivel educativo, violencia familiar, una sociedad deshumanizada, el consumo de alcohol y drogas, la pobreza y muy destacado el PARO con altos niveles de desempleo. Las Administraciones públicas, local, autonómica y estatal, tienen y deben marcarse como objetivo fundamental adoptar medidas que hagan fomentar el empleo para hacer que las familias y los jóvenes vean cubiertas sus necesidades más básicas y se sientan útiles a la sociedad en la que viven.
El desempleo y la falta de ingresos y recursos hacen que muchas personas desemboquen en la comisión de delitos contra el patrimonio y la propiedad y otros tipos de acciones delictivas que causan una gran inseguridad en la sociedad. Es obligatorio que todos los miembros de una comunidad consigan salir del desempleo porque la consecuencia inmediata es la mejoría en la calidad de vida de los ciudadanos. En nuestra ciudad existe un elevado número de personas sin empleo y ese factor provoca que aumente la inseguridad. La política y su ejercicio debe marcarse como objetivo fundamental reducir el paro existente dando prioridad absoluta a este gravísimo problema. Viviremos más seguros.