El director territorial tiene la “certeza” de que una prórroga de los Presupuestos del Estado no afectará a la atención al paciente.
La incertidumbre política que amenaza los Presupuestos Generales del Estado proyecta su sombra sobre las cuentas del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) para 2017. El director territorial de la sanidad pública, Fernando Pérez-Padilla, garantizó, en respuesta a los periodistas, que en caso de una hipotética prórroga de las cuentas de Ingesa tiene la “certeza absoluta de que no supondrá” problema alguno para la población. La institución que encabeza, aseguró, tiene un “respaldo tremendo del Gobierno” de la nación ya que depende directamente del Ministerio de Sanidad, sin que ello signifique que la cartera cuyas funciones asumió Fátima Báñez no vaya a exigir una “eficiencia” en la gestión de los recursos.
“Todo está congelado porque, naturalmente, mientras los Presupuestos Generales del Estado no estén al día, tendremos que seguir igual que el Gobierno en funciones: con los mismos –presupuestos– del año pasado. Intentando no sobrepasar los límites que se pusieron de techo de gasto y a la espera, como todo los españoles, de ver en qué devienen los eventos políticos en los próximos meses”, razonó Pérez-Padilla.
En cuanto la posibilidad de que las plazas de nueva creación peligren por las dudas que planean sobre los Presupuestos, el máximo representante de Ingesa aclaró que las mismas están “cubiertas ya”, pero están a la espera de que la Dirección General de Ingesa “promueva una resolución con la ampliación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) y eso requiere incluso llevarlo a Consejo de Estado, algo que ahora mismo no es posible”. Por este motivo, los profesionales están “contratados como necesidades del servicio”, a la espera de que pueda realizarse esa “redistribución” y se incorporen a las plazas para las que “han sido denominados”. Como ejemplo, el director territorial habló de “una enfermera de Psiquiatría”.
Desmiente la demora en la lista de espera denunciada por SATSE
A preguntas de los medios de comunicación, Pérez-Padilla desmintió que la lista de espera en el Centro de Fisioterapia de Otero alcance una demora de dos meses, como denunció esta semana el Sindicato de Enfermería (SATSE). “Tras repasar las listas de espera, que estaban en torno a 12 o 15 días en los últimos meses, en agosto ha bajado a dos días. ¿Por qué? Porque hay mucha gente que toma vacaciones y no acude a la Fisioterapia o la pospone, que también es algo que se puede hacer dentro del protocolo médico. Se puede posponer un mes y luego reiniciarla. Entonces, muchos de nuestros usuarios aprovechan el periodo estival para posponer ese mes de tratamiento, sobre todo, los que son más crónicos”, aseguró el director territorial. El portavoz de la sanidad asistencial aprovechó para anunciar que Fisioterapia cuenta con un administrativo contratado en la Zona II “sustituyendo al administrativo que está de vacaciones” y, por tanto, “sustituciones se hacen en valor de las necesidades que hay”.