Un individuo ha conseguido robar este viernes varios sellos y recetas en una consulta de una doctora del centro de salud del Recinto, emprendiendo después la huida. Su acción ya ha sido denunciada por la propia profesional médica en el Juzgado de Guardia de Ceuta, aportándose la identidad del implicado, un asiduo a este centro buscando siempre que se le expidan recetas para la compra de pastillas como Rivotril o Trankimazin. Se sospecha que detrás de esta actuación hay algo más que el propio consumo, ya que hace tan solo unos días ya se le había expedido recetas para tal fin siendo imposible que necesitara más. El cierre de la frontera del Tarajal ha derivado en un aumento notable del tráfico de pastillas con destino al mercado marroquí, lo que genera ganancias importantes ya que los precios se han disparado ante la carestía del producto. Esto anima a que se multiplique ese traslado.
La alerta de este robo se produjo pasadas las tres de la tarde, cuando el vigilante del centro se percató de que algo anómalo sucedía, ya que este individuo había accedido al centro de salud argumentando que se le había expedido una receta que no admitía la farmacia por algún error. Con la excusa de ver a su doctor, accedió a las dependencias. El vigilante sospechó y comenzó a buscarlo, yendo consulta por consulta hasta dar con él. Había revuelto toda la sala de una doctora buscando recetas, ya que con anterioridad –se desconoce en qué momento- se había hecho con unos sellos que esta médico echó en falta pertenecientes a doctores sustitutos. Necesitaba esas recetas para poder falsificarlas y tener acceso así a las pastillas.
El vigilante consiguió en un principio retenerlo y, sobre todo, evitar que pudiera cometer nuevos robos lo que habría provocado un mal mayor. No obstante el individuo pudo zafarse y escapar del lugar. Está plenamente identificado al ser un paciente habitual del centro y denunciado en el juzgado para que las fuerzas de seguridad puedan dar con él.
Había ido antes al centro buscando que le recetaran pastillas
Antes de producirse este robo, el sujeto había acudido al centro de salud pidiendo cita urgente con algún médico para que se le recetara pastillas, trámite que no se llevó a cabo porque el mismo día 3 se le había suministrado.
En este suceso, que ahora derivará en el intento de localización del implicado, cabe destacar la intervención del vigilante de seguridad que si bien no pudo impedir que el ladrón escapara sí abortó un robo mayor, además de que consiguió vincularlo con la acción delictiva al sorprenderlo in fraganti, dato determinante para la posterior acción judicial que se lleve a cabo cuando se le pueda detener.
Este mismo viernes la Guardia Civil informó en una nota de prensa del intento de pase de pastillas usando un propulsor para cruzarlas a nado a Marruecos. El autor de este delito contra la salud pública escapó, pero el caso evidencia el interés que suscita este mercado específico de drogas.