Cuando se saca dinero en un cajero automático en la vía pública hay que tener mucho cuidado, en Ceuta o en cualquier otro punto del país y del mundo. No vale despistarse porque, según advierte la Guardia Civil a través de sus redes sociales, se continúa detectando en los últimos meses una de las modalidades de estafa más común en estos lugares: el robo por la modalidad de 'lazo libanés'. Pero, ¿de qué se trata exactamente? No es ni más ni menos que un dispositivo de plástico o cartulina que los estafadores colocan en la ranura del cajero automático simulando la ranura donde se introduce la tarjeta de crédito y cuya parte final está rodeada por un "lazo" realizado con cinta magnetoscópica. Así, lo que logran es evitar que el cajero reconozca la introducción de una tarjeta.
"Normalmente los estafadores seleccionan los cajeros utilizados por extranjeros a última hora de la tarde. En el momento en el que se introduce en la falsa ranura, esta queda atascada y comienza la segunda fase de la estafa", advierten desde la Benemérita. Mediante una forma gráfica la Guardia Civil lo ha explicado a través de sus redes sociales
Esa 'segunda parte' consiste en 'asistir' al afectado. Y es que simulan ofrecer su ayuda a la víctima, así que cuando esta se va del lugar, rápidamente extraen su tarjeta, apoderándose de ella y empiezan a utilizarla principalmente comprando en establecimientos de todo tipo. En ese sentido, la principal recomendación que existe ante esta situación es que, ante cualquier sospecha, no se vaya del lugar y se llame inmediatamente al 062 o al 112 para poder recibir la ayuda de las autoridades competentes en el lugar donde le haya ocurrido esta incidencia. De lo contrario es muy posible que en pocos minutos empiecen a 'vaciarle' sus ahorros.
Realizar esta estafa implica, por tanto, de un acondicionamiento previo de los cajeros escogidos por los ladrones ya necesitan colocar el mecanismo con el que logran que la tarjeta se quede 'atrapada'. De todos modos, no es el único método que estas organizaciones utilizan para robar a través de nuestras acciones en cajeros automáticos.