El proyecto de
construcción en Ceuta de un
Centro Educativo Integrado con unidades de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato en el solar del antiguo acuartelamiento del Brull sigue sin desatascarse. Después de mil vicisitudes ahora ha acabado sobre la mesa de
Tragsa, a la que el Gobierno ha solicitado que “tarifique” las obras con el objetivo de “encargarle” la ejecución de las mismas.
El medio propio todavía no ha terminado el trabajo dos meses después de que el concurso licitado por la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de Cultura
quedase desierto.
El Gobierno de Sánchez ha explicado al
senador ceutí David Muñoz Arbona que “tras mantener contactos con diversas constructoras, se confirmó que ninguna de ellas estaba interesada en la ejecución de la obra debido a las importantes dificultades para su correcta realización, debido fundamentalmente a la falta de mano de obra cualificada y a la necesidad de transportar todos los materiales desde la península, lo que encarece de forma importante el precio de la obra”.
Llamativamente, el Gobierno había estimado inicialmente que no tendría que gastar más de unos 6 millones en el proyecto. El año pasado elevó su presupuesto hasta 18,2 y asumió que para su ejecución harían falta 3 años.
Cuatro años recalificado
Ni así, pero entre promesas van pasando los años. Ya hace más de cuatro que el Consejo de Ministros recalificó la parcela que a su vez cedió la Ciudad a la Administración General del Estado tras comprarla a Defensa para la construcción de viviendas protegidas.
Después el presupuesto disponible se dedicó a un centro educativo en el país vecino y, cuando por fin se sacó a concurso, ninguna empresa presentó ni oferta.
De esa forma sigue sin moverse un ladrillo para la construcción del que sería el primer colegio levantado desde cero en Ceuta en más de 30 años.
El proyecto elaborado prevé que, si algún día es una realidad, dispondrá de 6 aulas de Infantil, 12 para Primaria, 16 de Secundaria y 6 para Bachillerato, con sus zonas de administración y sus respectivos servicios comunes. Contará con alrededor de un centenar de docentes y unos mil estudiantes.