Una sanidad desbordada. Así podría resumirse la falta de profesionales que aqueja al área de Ceuta a la que los sanitarios buscan poner fin. Desde hace más de once meses, a pie de calle, han pedido una respuesta que revierta su situación.
En plena “tregua” de la huelga iniciada en marzo, la fuga de médicos que no cesa ha dejado una docena de puestos sin cubrir en Atención Especializada en el Hospital Universitario de Ceuta.
Urología, dermatología, traumatología, cardiología, la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y urgencias son las especialidades más afectadas por la huida de los facultativos que dejan atrás el clínico de Loma Colmenar, tal y como indica Abdelghani El Amrani, representante del Sindicato Médico de Ceuta (SMC). Unos huecos sin cubrir que inciden directamente en los propios profesionales a nivel laboral y personal por la sobrecarga de trabajo que generan, no solo en los pacientes.
No hay reemplazo para el jefe del área de urología tras su jubilación. Dermatología requiere de dos profesionales y solo hay uno a media jornada mientras que en traumatología solo hay cuatro profesionales de los ocho que se necesitan. Tres de ellos solo tres trabajan en las guardias, por lo que no hay traumatólogo de presencia.
A estos se suman urgencias, donde los sanitarios se encuentran “desbordados”; cardiología, área en la que hay solo dos profesionales tras el abandono del puesto de un especialista y la UCI, que recientemente ha sido testigo de la dimisión de un profesional, el último que se incorporó en esta área.
En el Servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), tres plazas no salieron a concurso se estabilización y actualmente están cubiertas por médicos de atención primaria.
El 061 ha perdido a un compañero y actualmente hay 10 sanitarios, 4 de ellos fijos. Cuatro intensivistas dejaron el centro en dos años. Psiquiatría echa en falta tres facultativos más y regularizar la hospitalización de pacientes agudos. Rehabilitación solo cuenta con una profesional, una situación que se repite en endocrinología donde antes trabajaban dos especialistas.
Otro de los problemas más acentuados es la situación de los radiólogos. Muchos de ellos se encuentran con una prórroga de su jubilación y faltan técnicos formados en la nueva máquina de resonancia, la RMBN de tres teslas. Ante esta falta de personal, a los médicos mayores de 55 años no se les concede la exención de guardias.
“Cansado”. Así se siente Chema Miralles, cardiólogo del Hospital Universitario de Ceuta. La falta de personal pasa factura a quienes están al pie del cañón. A pesar del efecto de desgaste que padecen los profesionales, asegura que intentan “poner buena cara para que los pacientes se vayan a casa bien atendidos”.
“El trabajo de cuatro personas lo hacemos dos”, declara. La situación también hace mella en su descanso. Es frecuente que tanto él como su compañero empleen más horas para dar total cobertura a los pacientes. “Es un costo también de nuestro tiempo libre”. Chema asegura que en su área están “limitados”. El día a día en cardiología se resume en urgencias, pruebas complementarias, consultas externas entre otras labores que entre los dos tratan de resolver.
El especialista insiste en la necesidad de tomar medidas que permitan paliar la situación, en especial aquellas que permitan retener a profesionales, una demanda comparte con el resto de sanitarios.
"La sanidad en España es un lujo, un lujo del que no somos conscientes"
“Hay que buscar fórmulas para atraer a profesionales a una ciudad como Ceuta. Aquí se vive muy bien, es un sitio especial. La gente se deja querer”, asegura. A pesar de las dificultades que afrontan en el día a día, Chema explica que ellos siempre tratan de dar la mejor asistencia a los pacientes. “Se ha puesto en marcha el TAC coronario y ahora se incorpora la cardioresonancia. Necesitaremos formación en ese sentido. Aun siendo una sobrecarga más para el trabajo diario”.
Aprender para saber manejar nuevas técnicas y dispositivos también es parte del trabajo de los sanitarios. Una simple acción que en Ceuta tiene un precio.
Desplazarse para recibir una formación, y el tiempo que ello conlleva, supone un especialista menos en plantilla, por lo que este problema de falta de personal, se agrava. Chema se muestra poco confiado en lo que a soluciones se refiere. Sin embargo, en él hay un rayo de esperanza y cree que la situación puede cambiar. El cardiólogo hace un llamamiento a los pacientes. Les pide que apoyen a los sanitarios para dar respuesta al problema. Él solo ha podido hacer huelga tres días. Su deber y su vocación le impidieron continuar.
Es esta razón por la que cree que la huelga no ha tenido suficiente repercusión. Al ser un servicio esencial, hay médicos que no han podido hacerla. “La sanidad en España es un lujo, un lujo del que no somos conscientes porque tenemos asumido que está ahí. Si no la cuidamos, algún día no habrá sanidad para todos”.
4 Traumatólogos. Faltan cuatro médicos especialistas soll el clínico de Loma Colmenar
2 Dermatólogos. Los facultativos echan en falta a dos especialistas en este área
2 Cardiólogos. Solo dos especialistas se encuentran en este área desde la partida de otros dos especialistas, puestos que no están cubiertos.
1 Intensivista. Recientemente dejó su puesto en la Unidad de Cuidados Intensivos.
1 Endocrino. En noviembre de 2023 se marchó una de las endocrinas, especializada en la técnica PAAF. Ahora solo hay una especialista.
3 Radiólogos. La nueva máquina de resonancia tres teslas requiere de un grupo de cinco especialistas y solo hay dos.
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