La publicación en el Boletín Oficial de la Ciudad de un comunicado remitido por la Capitanía Marítima y referido a la no navegabilidad del Foso de San Felipe ha suscitado una serie de protestas y críticas, entre las cuales destaco la de la Cámara de Comercio- totalmente opuestas a una idea que supone, según argumenta dicha Corporación, un serio golpe a uno de los más significativos atractivos turísticos de Ceuta..
También ha salido a la palestra Ciudadanos, imputando ese comunicado al Gobierno de la Ciudad, cuando éste nada ha tenido que ver al respecto. Que yo sepa, la Capitanía Marítima no figura entre las competencias transferidas a nuestro ente autonómico. Bueno, el Boletín si es de la Ciudad, pero estoy seguro de que lo que remiten otros organismos del Estado no se somete a censura previa. Ni eso, ni nada.
La verdad es que quienes protestan no llevan razón, porque lo que dice el Capitán Marítimo es totalmente cierto. El Foso de San Felipe no es navegable. Y no lo es porque nunca fue de agua. Soterrado ahora bajo la Avenida de San Juan de Dios (la del cuartel de la Policía Nacional y del ambulatorio José Lafont), ese foso era uno de los elementos disuasorios situado junto a las Murallas Reales, una excavación de varios metros que siempre estuvo más elevada que el nivel del mar, razón por la cual nunca ha sido navegable, y mucho menos ahora.
En dos artículos míos –uno en mayo de 2009 y otro, también de mayo, pero del 2014, (con éste, curiosamente, los tres en mayo) he intentado aclarar la confusión que se viene padeciendo, y que –como ahora se dice- se ha vuelto viral. En Ceuta existían tres fosos, dos de tierra –la Almina y San Felipe.- y otro que conectaba por mar las dos bahías, conocido desde antiguo como el “Foso del Agua”, y más modernamente como “Foso de las Murallas Reales”, que ha sido navegable desde su construcción,. Lo prueba el hecho de que en el lienzo de la muralla donde está la Puerta Califal existía un hueco por el cual, durante siglos, se introducían mercancías y, pertrechos, pólvora y munición para la defensa de la plaza., todo descargado directamente de una embarcación.
Desde hace varios siglos, el Foso del Agua ha venido sirviendo para que los pesqueros ceutíes cruzaran de una bahía a la otra, evitando así el rodeo ý el peligro que nos demostró aquel terrible y recordado 12 de diciembre, en el que allí se hundieron tres pesqueros, pereciendo muchos de sus tripulantes. Ahora, lo cruzan, además, embarcaciones de recreo y el “Desnarigado”, al que no debemos olvidar, por cuánto supone de interesante atracción turística. Ese foso sí que ha sido, es y debe seguir siendo navegable.. Si hay que dragar, que drague quien sea competente para ello.
Me gustaría disponer de un mapa o carta militar de hace siglos referida al recinto defensivo de las Murallas Reales, para demostrar de una vez por todas que el llamado Foso de San Felipe era de tierra. Al fin y al cabo, la Capitanía Marítima lleva toda la razón: el citado foso ni era navegable, ni lo puede ser.
Como ya hice en anteriores ocasiones, llamo a corroborar lo anterior tanto al Cronista de la Ciudad como al Instituto de Estudios Ceutíes, y, si fuera factible, también a la Comandancia General, donde habrá pruebas fehacientes de lo que afirmo.
Hay que sacar del error a los medios informativos y a tantas personas –cada vez más- que vienen cayendo en este error. Ateniéndonos a lo ya expuesto, que es la verdad,. para decir que el Foso de San Felipe no es navegable no hace falta publicarlo en el BOCCE.
¿Quién iba a intentar navegar por debajo de la Avenida. de San Juan de Dios?