La hembra tenía 20 años y su muerte se produjo por causas naturales, comunicó el veterinario. Alfonso Morey, veterinario contratado por la Ciudad Autónoma para el mantenimiento de los animales del Parque de San Amaro, confirmó ayer la defunción de una cierva adulta, conocida por el personal de estas instalaciones como la ‘abuela’ de la manada.
El ejemplar, que rondaba los 20 años, murió por causas naturales, aclaró el especialista, quien explicó que carecía de dientes y su ausencia resulta determinante para los animales herbívoros. A pesar de que el personal de San Amaro le proporcionaba pienso que le facilitaba que no masticara, indicó Morey, ya encontraba serias dificultades para mascar alimentos.
Según señaló el veterinario, el servicio de vigilancia del Parque se percató de que algo no iba bien con uno de los animales porque permanecía inmóvil hasta que se dieron cuenta de que había muerto.
En la actualidad, la manada de ciervos está compuesta por siete ejemplares adultos y una cría. “La abuela nos ha regalado durante todos estos años momentos entrañables que nunca olvidaremos”, reconoció Morey.