La
Policía Nacional necesita de personas con vocación, de jóvenes que lleven toda una vida soñando con ponerse el uniforme. Ese es el caso de Vicente Falcón, natural de Ceuta, que lleva desde el 19 de julio en prácticas en la
Jefatura Superior del Cuerpo en la ciudad. El periodo de prácticas es de 11 meses antes de jurar el cargo y durante este tiempo van rotando por los diferentes servicios que presta la Policía Nacional en nuestra ciudad. Falcón, en estos dos meses, ha estado en la Unidad de
Conducciones, en frontera y ahora en la Oficina de Denuncia.
Además, ha formado parte del equipo de exhibición de la Escuela de Policía, con actividades que se enmarcaron en los actos centrales del Patrón en Salamanca. Este alumno aún recuerda cuando de niño correteaba por la Jefatura Superior para ver a su padre, también agente, para visitarle diariamente. Desde entonces él sabía que quería seguir los pasos de su progenitor, ya que es una cosa que ha vivido desde que nació.
“Principalmente fue la vocación por mi padre, que fue policía nacional y se jubiló hace ya cuatro años. He seguido su legado, desde pequeño estaba correteando por la comisaria y veía a sus compañeros con los que algunos comparto hoy en día servicio. Terminé
bachillerato y no dudé en prepararme las oposiciones. Me lancé por ese objetivo, estuve durante tres convocatorias preparándome y a la tercera fue la vencida”, rememora. Hace poco tiempo que salió de la Escuela Nacional de Policía en Ávila. Aún tiene el recuerdo muy reciente y la sonrisa al hablar de ello lo evidencia. Reconoce que es un proceso duro pero muy reconfortante.
“El recuerdo sobre el periodo de Ávila es de haber vivido algo muy bonito. Tengo nostalgia”, asume, “hace poco tiempo estuve allí por una exhibición y recordó mi paso por la academia. Estuvo baste bien y recuerdo con cariño a los profesores y a los compañeros con los que haces piña porque al final pasas mucho tiempo con ellos”. Su día a día en el Cuerpo está siendo bastante grato. Falcón no quiso hacerse grandes expectativas y está viviendo el día a día con ilusión y, sobre todo, con ganas de seguir aprendiendo para formarse como un buen profesional.
“La verdad que estoy bastante contento con el tiempo que llevo desempeñando. No he tenido expectativas, porque suelo ir así en mi día a día, y la verdad es que bastante grato con el recibimiento que he tenido tanto de jefes, como de compañeros. Y sobre todo aprendiendo un montón, que es lo importante, para eso está la formación”.
A pesar de ser originario de la ciudad, Falcón quiere pedir destino a la capital de España una vez acabe su periodo de formación. Pero no descarta volver dentro de unos años y seguir los mismos pasos que daba su padre día a día en la Jefatura Superior de Ceuta.