Este viernes el SC de Tetuán y el Ittihad Tánger se enfrentarán en la capital tetuaní en un encuentro que forma parte de la segunda vuelta del Campeonato Nacional de Liga de Fútbol, tras pararse la temporada pasada por el descenso del equipo de la Paloma Blanca a la segunda división nacional. Un choque que, al margen de lo meramente futbolístico, trae de cabeza a las autoridades marroquíes porque el objetivo es, sin duda, evitar cualquier tipo de enfrentamiento y altercado entre las aficiones de ambos equipos que son, tradicionalmente, máximos rivales.
Todo ello después de que días atrás varios estadios marroquíes hayan sido escenario de altercados que se han saldado con decenas de detenciones e incluso heridos, como el caso de lo ocurrido este domingo en Casablanca.
Pues bien, según se publica en la Agencia Tanja 24, “los aficionados del Ittihad Tánger tendrán prohibido desplazarse hasta la ciudad de Tetuán, con el fin de animar y apoyar a su equipo en su enfrentamiento con su tradicional rival, el SC Tetuán, en el estadio Sania Ramel de Tetuán”.
Según fuentes informadas, las autoridades locales están todavía inmersas en el proceso de dictar una resolución para impedir todo tipo de circulación de hinchas de Tánger hacia la ciudad de Tetuán, a fin de evitar los enfrentamientos o disturbios que puedan producirse entre los hinchas de los dos equipos. En estos días se estarían ultimando los detalles de esta normativa, así como las instrucciones a seguir por los servicios de seguridad.
Según las mismas fuentes, esta decisión está relacionada principalmente con la preocupación por la seguridad, después de las operaciones de seguridad llevadas a cabo por los intereses del estado de seguridad de Fez, al margen del partido de fútbol que se reunió el pasado sábado por la noche, entre los equipos Magreb Fez y Magreb Tetuán, resultó en el arresto de 32 personas, incluidos 11 menores, bajo sospecha de participación en disturbios deportivos, posesión de armas blancas, embriaguez pública abierta y lanzamiento de piedras junto con pérdidas materiales a la propiedad pública.