Cualquier ciudadano, venga de donde venga, que entre en nuestro país y llegue a conocer que la lengua oficial del Estado no es posible enseñarla en todo el territorio de la nación, comprenderá hasta qué grado de desquiciamiento hemos llegado y seguramente nos volverá a mirar para saber, si es posible, de qué especie de simio descendemos. Si a continuación le decimos todo orgullosos que el Tribunal Supremo ha dictaminado que en Cataluña solamente se pueden enseñar en español el 25% de las asignaturas de un sistema educativo que no es homogéneo, esta persona inmediatamente pedirá permiso para ir a defecar, ya que no podrá comprender tanta sabiduría en nuestros tribunales.
Una vez realizada la deposición, podemos decirle que en España existen 17 Comunidades Autónomas y que todas quisieran tener una lengua distinta del español, porque los políticos que ellas acampan han comprendido que los que han gozado de ese privilegio en sus Comunidades son los más favorecidos por el Gobierno de la Nación. Esa es una forma de ser distintos. Así un vascongado es muy distinto de un murciano, ya que el vasco tiene una lengua ancestral, aunque ha tenido que ser adaptada a los tiempos modernos (Aeropuerto , Aireportua) y ser unificada (es decir inventada) ya que se hablaban distintas lenguas en sus caseríos dependiendo de si eran de Vizcaya o de Guipúzcoa, los de Álava como siempre han sido castellanos estaban al socaire de los políticos que para contentarlos les pusieron un aeropuerto y la capital de la Comunidad Autónoma.
Los “nazionalistas” vascos, para que empezasen con la inmersión en vascuence, pieza fundamental para la construcción del estado vasco independiente y socialista y bastión para perpetuar la hegemonía “nazionalista”, soltaron a la ETA a asesinar inocentes y hasta ahora, en que el vascuence está en todas en todas las escuelas. Claro, la ETA que nació para que los vascos tuvieran más privilegios que el resto de españoles, ha tenido que asesinar a 853 personas, entre niños, mujeres, Guardias Civiles, Policías, Militares, Jueces, Fiscales , Periodistas y Políticos, además de 358 asesinatos sin esclarecer,2.597 heridos, 2.000 huérfanos, 10.000 extorsionados y 100.000 exiliados forzosos, de paso en las Vascongadas, hay 194 ayuntamientos de mayoría “nazionalista” y solo 14 no “nazionalista”, el PNV cuenta con 1.018 concejales, Bildu con 894; el PSE con 196 y el PP con 79, y todos con el Cupo.
Los vascos ya se diferenciaban antes de los murcianos porque llevaban boina, levantaban piedras, tiraban de una soga, empujaban bueyes y cortaban leños, mientras los murcianos comían habas y tenían unas huertas extraordinarias. Pero estos vascos, al otro lado de los Pirineos no pueden hablar más que en francés, salvo en sus caseríos y los murcianos seguían comiendo habas y hablando español en toda España, y francés en Francia.
Las calles de Murcia y de las Vascongadas, son iguales, todas llenas de bares y el deporte nacional es ir a tomar tapas, en eso estamos todos inmersos. El caso de Cataluña es similar, una de sus huellas ancestrales, la sardana, la creó un andaluz, José María Ventura Casas, de Alcalá la Real, Jaén, y las calles de Cataluña son similares a las de Murcia como similar es, con perdón, la misma cultura, ir de tapas. Los de Cataluña, al otro lado de los Pirineos también tienen que hablar exclusivamente en francés, si por ejemplo, quieren preguntar a un guardia, supongamos por una botica. Todas las tradiciones junto con las hablas, dialectos y lenguas, en lugar de arracimarse y tener como resultado una espléndida cultura nacional, al avizorar los políticos cortos de miras intelectuales pero largos en la corrupción con el maná que suponía el gestionar presupuestos millonarios en cada una de sus autonomías, han sido fragmentadas, al decidir poner barreras lingüísticas para poder así, de una parte amaestrar a su antojo a la población mediante el sistema educativo basado en una lengua distinta de la oficial del estado, el español, y a los diferentes gobiernos nacionales no les ha importado porque tenían la necesidad perentoria de unos 4 o 5 votos para aprobar los presupuestos, mientras dale que dale.
Ese sistema ahora lo han copiado el resto de autonomías que pueden tener una lengua algo distinta del español, gallego, valenciano, mallorquín, la fabla aragonesa y por no ser menos, el bable, que seguramente era el que hablaba Don Rodrigo o el oso. Y todo eso a pesar de que tenemos una Constitución que señala en su artículo 3 que el español” es la lengua española oficial del Estado”, y “las demás lenguas españolas serán también oficiales en las respectivas Comunidades autónomas de acuerdo con sus estatutos”. Las CC.AA. con otra lengua, ahora desprecian el español y ponen todo su interés en la inmersión lingüística en la lengua de la Comunidad, que es la única que consideran propia. El español como lengua, no va a sufrir menoscabo alguno porque no se pueda hablar en una parte del territorio español al ser la lengua de unos quinientos millones de habitantes en el planeta. Pero el daño que se hace a los habitantes de las comunidades con dos lenguas que no deseen hablar y educarse ellos y sus hijos nada más que en español, es el germen de una separación que inevitablemente, si no se corrige en un futuro llegará a un enfrentamiento civil.
“Una estirpe, una lengua y un destino” es el lema de la Asociación de Academias de la Lengua Española donde se integran las veinticuatro Academias de Lengua Española existentes en el mundo que trabajan por la integridad y crecimiento del idioma español. Además de las Academias de cada uno de los países hispanoamericanos, se integran las de los Estados Unidos, Filipinas, Guinea Ecuatorial e Israel. La coautoría de las Academias produce entre otras obras el Diccionario de la Lengua Española, un Diccionario panhispánico de dudas, un Diccionario de americanismos, además organiza la Escuela de Lexicografía hispánica. Esta Asociación junto a Real Academia de la Lengua fue galardonada con el premio Príncipe de Asturias de la Concordia en el año 2000. Existen además otras 57 Asociaciones de la Lengua Española por todo el mundo en países tales como China (2) Japón, Ghana, Costa de Marfil, etc. Prácticamente no hay un solo rincón del mundo donde no exista una Asociación de la Lengua española o una delegación del Instituto Cervantes.
Estas asociaciones de lingüistas también han ensanchado el mundo del Hispanismo, término que designa el estudio de la cultura española, es decir no solo de la lengua, hispanoamericana, y en general hispana. Todo ello proveniente del Descubrimiento y fundamentalmente a partir del siglo XVI donde pronto hubo necesidad de aprender español, conocer la cultura española, sus costumbres, sus personajes literarios, sus obras. Esa necesidad pronto fue respondida por personajes como Antonio de Nebrija autor de la primera Gramática castellana (1492), o Juan de Valdés, que compuso para los deseosos de aprender nuestra lengua su Diálogo de la lengua. Más tarde en 1558 el licenciado Cristóbal de Villalón escribió en su Gramática castellana (Amberes 1558) que el castellano era hablado por flamencos, italianos, franceses e ingleses. El Hispanismo hoy existe en el mundo entero, siendo nuestra cultura un verdadero patrimonio de la humanidad.
Por ello el intento de supresión de la enseñanza de la lengua española, en regiones del país donde nació, con la importancia mundial que tiene es algo que no podemos consentir y debemos recriminar a cualquier político que lo permita y a nosotros mismos por no haber hecho lo suficiente, si dicha supresión se lograra.
Dice Rajoy que “no hubo ni habrá impunidad para los terroristas” “La democracia ha vencido a ETA”, pero ya conocemos la profundidad y confianza de las convicciones del Registrador. ETA simplemente se ha transformado pero continúa con la misma estrategia, la serpiente simplemente cambia de camisa, y la supresión del español continua como ya ha comenzado en Navarra. Todas las ratas ya van pidiendo el acercamiento de presos primero y la salida de las cárceles después, los presos que después del tiro en la nuca piden un minuto de silencio. ¿Puede haber mayor ignominia? ETA, ya no puede asesinar a Juan Romero Álvarez, porque ya lo hizo. Ahora dice que no volverá a asesinar porque a cambio pacíficamente, como en Alsásua, va a obtener todo lo que pedía cuando asesinaba, acercamiento de presos, unión de las Vascongadas con Navarra, e independencia, es decir el proceso de ruptura de España.
Este país, nuestro país, España, no va a ser salvada por los políticos actuales que deben irse lo antes posible convocando nuevas elecciones generales. Y la primera exigencia para los venideros es que solo exista una lengua oficial del estado como ocurre en Francia. Si es necesario reformar la Constitución, hágase, y si es necesario implantar el 155 en cada una de las CC.AA. que atenten “gravemente al interés general de España”, hágase. Hágase todo lo necesario para evitar la desunión de y la separación de los territorios que hoy conforman España. Empecemos por la lengua, la única de las españolas universal, el español. Es el primer paso para evitar que continúe el proceso de ruptura de España.