La pregunta pone a los camareros de Ceuta en el disparadero. ¿Qué tal la guía que ha puesto a disposición de los hosteleros la Cámara de Comercio, a través de Internet, para que se inicien en el uso del inglés? Nada, no la conocen.
“La idea es buena, pero sería mejor que se ideara en francés, muchos de los turistas y los ingresos que vienen de fuera son de marroquíes francófonos, son ellos quienes inyectan dinero realmente en nuestra economía”, apunta uno de estos trabajadores, que no quiere revelar su nombre.
Ceuta, ciudad multicultural, abierta al mundo, a las lenguas, enmudece cuando se le pregunta por el inglés. Al menos en el sector de la hostelería. “Por el francés también, no crea, aquí hay muchos camareros que no saben hablar más que castellano y no se preocupan por aprender el francés, que es el que les da de comer en lo que a turismo se refiere”, señala un viandante con andares rápidos. No es fácil cogerle el paso.
Volvamos a la guía. A ‘Inglés de ayuda a Hostelería’, una iniciativa que ha visto la luz gracias a la autorización de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de A Coruña, que es quien ha publicado y editado el manual. Hacerse con esta publicación, de apenas ocho folios, es totalmente gratuito. A golpe de ratón. Teclee la dirección de la Cámara de Comercio de Ceuta (www.camaraceuta.org). Una vez dentro, verá en el centro de la pantalla el anuncio de la guía práctica en formato pdf. Lo que hay en su interior puede resolver de un entuerto a más de un camarero. Para eso ha sido creada.
Calidad en el servicio
“La verdad es que la iniciativa está bien, y se la agradecemos a la Cámara de Comercio porque pretende ahondar en la calidad del servicio que mostramos”, señalaba ayer otro hostelero. Pero ¿la conoce?, “bueno, algo había oído”, se excusaba. ‘Inglés de ayuda a la Hostelería’ recoge en ocho páginas frases indispensables para entablar una conversación en inglés. Frases de cortesía, para dar las gracias y disculparse. Y frases de recibimiento, en las que se resumen saludos y ofrecimientos. La despedida también se ejemplifica.
Cada frase se expresa primero en castellano, luego en inglés y además se acompaña de la pronunciación. La guía, que pretende mejorar la calidad de los servicios en los establecimientos hosteleros de la ciudad “parece que no ha tenido mucha aceptación entre los trabajadores de la hostelería”. Es el balance que hace otro chico detrás de la barra. “Yo es que llevo poco tiempo en este mundo, la crisis, ya sabe, que me ha empujado aquí, a la hostelería, pero nunca había oído lo de la guía”. El chico lo reconoce, el inglés es su asignatura pendiente. “De francés ni me hable, tampoco sé”. Los españoles y los idiomas están reñidos, dicen las estadísticas, no es sólo cuestión de Ceuta.
Los colores, los números, situaciones en los establecimientos de hostelería (para elegir el menú, la forma de pago,...) Esta guía, que ha contado con la colaboración de Mr. Barry Francis McGinley Jones, no se deja ningún detalle fuera. Además incluye en el listado palabras de vocabulario general, otras específicas para alimentación, para carnes, pescados y mariscos, frutas y verduras, postres, helados, bebidas y menú para diabéticos. “Voy a imprimirla y a colocarla cerca, es útil”, señalaba ayer un camarero convencido.