Una enfermera ha narrado al Sindicato de Enfermería en Ceuta (SATSE) su “horrible” experiencia laboral trabajando para el SAMU en la atención a los menores llegados a la ciudad autónoma procedentes de Marruecos durante la entrada masiva de hace dos semanas.
Esta ceutí, en búsqueda de empleo, recuerda que envió su currículum a esta empresa que apoya a los dispositivos de atención a los menores en Ceuta. Aunque empezaba a trabajar supuestamente este lunes, fue citada el sábado en el albergue provisional de Piniers, añade. Ella acudió para tomar contacto con el servicio y la hicieron quedarse no solo cinco horas ese día, sino que tenían la intención de que el domingo también acudiese a trabajar, pese a que aún no había firmado ni el contrato, asegura en un comunicado de prensa.
"Consciente" de la crisis humanitaria que atraviesa Ceuta y sin saber cómo decir que no, "hizo de tripas corazón y se puso manos a la obra". A pesar de su "fuerza de voluntad", ese mismo sábado dijo que se iba, reconoce. El detonante: “Querían ponerme a hacer test de antígenos sin protecciones y sin nada, solo con mi ropa de calle y la mascarilla que traía de casa”. Recuerda que allí había personas "supuestamente auxiliares de enfermería", ya que no tiene "certeza de que verdaderamente lo fueran", que indica que estaban realizando esas pruebas de antígenos "para las que no están cualificadas y cuya realización corresponde a las enfermeras".
Más de 1.000 niños, "todos a su cargo y al de una técnico"
Esa fue la gota que colmó el vaso de esta ceutí porque, antes, se encontró con que ella iba a tener a más de 1.000 niños "todos a su cargo, en solitario junto a una técnico de laboratorio, sin médico y sin ningún otro enfermero trabajando codo con codo ante tal volumen de personas. Increíble, lo que cuente es poco”, desvela la ceutí..
La enfermera que denuncia su experiencia laboral recuerda que el SAMU le “vendió” un puesto de trabajo que desempeñaría a turnos, de mañanas y/o tardes pero, finalmente, fue todo lo contrario. Desde Sevilla la telefoneó una persona que se identificó como trabajador del SAMU para informarle de la oferta laboral: una enfermera para el Tarajal. Después de requerir a la ceutí una serie de documentación para hacer un contrato de enfermería a jornada completa con fecha de comienzo este lunes, le proporcionó un número de teléfono para contactar con la responsable en materia migratoria.
La enfermera se llevó "muy buena impresión" de la conversación con el trabajador del SAMU en Sevilla, "a diferencia" de lo que ocurriría posteriormente en Ceuta. Cuando se puso en contacto con la responsable en la ciudad autónoma, ésta le informa de que finalmente no prestará servicio en las naves del Tarajal, sino en el albergue de Piniers. Cuando llega allí, se encuentra con, calcula, más de mil niños "con una zona de contagiados por coronavirus que está separada del resto. Al llegar, nadie le proporciona un EPI o cualquier otro medio de protección", afirma.
"Solo tres trajes EPI que se estaban lavando aunque son desechables"
En el aspecto laboral, cada vez que la afectada pregunta a la enlace del SAMU sobre los horarios o las condiciones laborales, "esta cambiaba de tema de conversación y no responde a las preguntas que le está haciendo", apunta en la nota de prensa. Del sueldo nunca supo nada porque nadie se lo explicó y, como nunca llegó a firmar el contrato, pues desconoce la cuantía o más detalles, según reproduce SATSE.
Aparte de ella, en teoría, estima la afectada, "estaría otra enfermera y una técnico de laboratorio, pero allí había unas diez personas que referían que eran enfermeras, aunque la enfermera que nunca llegó a ser contratada porque se fue el primer día sospecha que no lo eran". Esas personas estaban como voluntarios, sostiene, "en ningún caso estaban contratados". Para más inri, continúa, "tenían solo tres trajes EPI y se estaban lavando, cuando en realidad es material desechable, y en un foco de coronavirus activo de contagio. Por tanto, las medidas de prevención que le estaban proporcionando eran nulas".
SATSE exige a la Ciudad Autónoma que supervise las condiciones en las que se está dispensado este servicio "tanto en el cumplimiento de los derechos laborales del personal como en garantizar la seguridad sanitaria en un foco de contagio activo".
El Sindicato de Enfermería en Ceuta no ha sido el único en quejarse de esta situación ya que previamente lo hizo CSIF con otras categorías profesionales.
SAMU dice que CSIF "exagera" las cifras aunque reconoce que las condiciones de trabajo son "muy duras"
Con el mayor de los respetos por la labor del sindicato CSIF en defensa de los trabajadores, y con motivo de las recientes publicaciones en medios locales de Ceuta sobre la denuncia de las condiciones laborales de los equipos y voluntarios de SAMU desplegados en la ciudad autónoma, la propia empresa ha puesto de manifiesto que su comunicado "carece objetivamente de base, lo que queremos entender, se debe a la precipitación con que se emite".
El "único hecho cierto" del mismo es que las personas implicadas en el dispositivo de ayuda humanitaria desplegado por la Fundación SAMU "han tenido que soportar condiciones de trabajo muy duras, incluyendo la duración de sus jornadas que, en ningún caso, han alcanzado las cifras que exagera el sindicato", asegura la empresa en un comunicado.
"No han sido menos, ni distintas de las de los miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, los sanitarios o el personal de otras ONG, en cuyo ejemplar despliegue nos sentimos orgullosos de haber participado", ha ensalzado SAMU.
La Fundación dice que hay que tener en cuenta que el contingente inicialmente desplazado por SAMU se ha nutrido de trabajadores de su Fundación, los cuales han solicitado "voluntariamente incorporase al dispositivo, así como de integrantes de su programa de voluntariado que han acudido al reto de atender esta emergencia".
SAMU y su Fundación recuerdan que llevan cuarenta años participando en acciones humanitarias a lo largo y ancho del mundo, entre las que se incluyen dispositivos sociales y sanitarios promovidos con motivo de desastres naturales, crisis migratorias o la pandemia por COVID-19, como por ejemplo, el contingente de 20 profesionales con amplia experiencia sanitaria que han partido hoy para participar en una misión de cooperación de apoyo a sanitarios y población afectada por el COVID-19 en el Hospital San Vicente de Paúl en Heredia (Costa Rica).
Para finalizar, ha resltado que la actividad desempeñada por el personal y los voluntarios de Fundación SAMU que están actualmente atendiendo la emergencia humanitaria en Ceuta se desarrolla con "total transparencia y estricta sujeción a las normas legales que la regulan".
Esta chica que esperaba tres mil pavos al mes, una oficina con médico de apoyo , que los compañeros le presenten el título por si duda de si son o no enfermeros y todos los niños que han entrado en Ceuta estén en pimiers??? No creo que esta mujer tenga mucha experiencia en menores . Que se dé una vueltecita y pregunte los he se han comido muchos antes anda! Samu contratara a menos gente para trabajar más , es una empresa lo normal y cuando quiera ahorrarse más pedirá más dinero o tirara de trabajadores de la ciudad. Ya lo veremos