La Hermandad de la Encrucijada ya está preparada para realizar su tan esperada Estación de penitencia. La cofradía tras su gran esmero por ultimar todos los preparativos y por recuperar los respiraderos y candelabros de la cola del palio, comienza la cuenta atrás para salir en procesión en las calles de Ceuta.
Solo quedan horas. Si la meteorología lo permite, la hermandad comenzará su itinerario a las 19:30 horas en la calle del Teniente Coronel Gautier. El color blanco y negro llenará de nuevo las calles de la ciudad en este esperado Jueves Santo.
A las 20:00 horas la cofradía dará paso al pregón y al llamado encuentro chico, uno de los momentos álgidos de esta procesión. Se trata dos tradiciones que desde la hermandad perpetúan y que tendrá por escenario el interior de la Plaza de África.
El Cristo de la Encrucijada se encontrará en este punto con la Virgen de las Lágrimas, donde, una vez reunidos, se pronunciará el pregón, a cargo del Padre Guillermo, director espiritual de la Hermandad. Rodeados por humaredas de incienso y una marea blanca y negra de penitentes, hijo y madre se cruzarán en el camino bajo la atenta mirada de los fieles.
Los devotos y hermanos esperan la celebración de este emotivo encuentro. Vigilan el parte meteorológico en estos días al igual que el resto de cofradías de la ciudad en una Semana Santa marcada por las precipitaciones y el viento.
Unos cincuenta minutos después, si finalmente se lleva a cabo la Estación de penitencia, la Hermandad entrará en Carrera oficial. Si las inclemencias meteorológicas no se oponen, este Jueves Santo las calles de Ceuta revivirán una noche de fe junto a la hermandad.
La Banda del Santísimo Cristo de la Encrucijada entonará las marchas que lo acompañarán desde la caída de la tarde hasta su recogimiento a las doce y media de la noche. Viajan desde Lourenza, Galicia, los músicos que caminarán bajo el resguardo del solemne palio de la Virgen de las Lágrimas.
Este año la cofradía ha logrado recobrar los respiraderos y candelabros de la cola del paso de la titular mariana. Estos elementos se vieron perjudicados en dos ocasiones, en concreto, por un derrumbe en el techo de la iglesia de San José y por un error. Se trasladaron las piezas del palio a un vertedero junto con otros escombros a raíz de esta caída de la cubierta del templo.
Sin embargo, el paso del Cristo era irrecuperable tras el incidente. Este año, de nuevo, será llevado a hombros por sus devotos, una imagen que no es nada nueva ni para la cofradía ni para Ceuta. Antes del año 2000, que fue cuando obtuvo el titular cristífero, daba sus pasos en manos de los fieles, que los llevaban en andas. La talla sacra estará escoltada por miembros de la Guardia Civil, muy relacionada con la Hermandad de la Encrucijada.
A ello se suma otro motivo que también sufren otras cofradías en la ciudad caballa: la falta de costaleros en las cuadrillas. Esta problemática, que es menos acentuada en la actualidad gracias al relevo generacional, afecta, sobre todo, a las hermandades del Jueves y el Viernes Santo. Es esta otra de las razones por las que, de momento, la cofradía opta por portar a hombros al Cristo de la Encrucijada, una decisión con la que están de acuerdo un amplio número de hermanos.
La hermandad cuenta las últimas horas para su tan esperada Estación penitenciaria. Después de un año de esfuerzos y preparación, los hermanos tienen la esperanza de que la lluvia cese, el cielo se despeje y les permita dar pasos firmes junto al Cristo de la Encrucijada y la Virgen de las Lágrimas.
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