La empresa pública Obimasa de Ceuta va a contratar una empresa de arboristas especializados en trabajos de trepa y poda en altura, así como de aplicación de técnicas de evaluación de riesgo de caída de los 21 ejemplares de gran porte de ficus o Laureles de Indias repartidos por distintos puntos de la ciudad para minimizar y prevenir el riesgo de caída de ramas o troncos con el consiguiente riesgo para las personas.
En paralelo, la administración realizará con medios propios medidas para “mantener la vitalidad” de esa arboleda que consistirán en aportar una capa de cobertera de suelo, un plan de riego extraordinario y, si fuera necesaria, la eliminación de solería de cemento impreso que en algunas zonas pudiera impedir el desarrollo de raíces importantes para la estabilidad de algún ejemplar.
Las diversas actuaciones y trabajos se van a realizar en la avenida de África, el IES Siete Colinas, la Fundación Gallardo y los Jardines de la Argentina.
En agosto de 2019 se produjo el desgarro de la rama de un ficus en la avenida de África y en marzo de 2020 se registró el colapso de un gran ejemplar en los Jardines de la Argentina que, tras apoyarse en otro, causó el descalzado del mismo y la rotura de la copa de un tercero.
Obimasa asumió entonces que era “imprescindible” valorar el riesgo de caída de otros ejemplares y tomar “las medidas necesarias” para “garantizar dentro de lo posible su seguridad y buen estado”.
En febrero de 2021 se hicieron trabajos de mantenimiento
A tal efecto en febrero de 2021 se hicieron trabajos de mantenimiento de poda de ramas secas o peligrosas, de laterización para conformar el dosel o reducir la copa, test de tracción y revisión de los anclajes.
Tras instalar distintas sustentaciones artificiales mediante cableados dinámicos entre las ramas de gran diámetro y eliminar ramaje seco, ahora se considera necesario “completar y continuar estas actuaciones para garantizar el mayor grado de seguridad y vitalidad de los ejemplares”.
La adjudicataria del trabajo deberá realizar una valoración del riesgo de vuelco de los árboles tanto visualmente como con resistografías y tomografías. A continuación se prevé “establecer un mantenimiento de poda de ramas secas”, ya que en las grandes y densas copas de esa arboleda se mueren por falta de luz de manera natural cuando no las necesitan.
Los anclajes se revisarán cada dos años para comprobar posibles variaciones de tensión o deterioro de los mismos por la fauna urbana.
No hay jardineros en el Ayuntamiento, verdad? Tampoco personal de los Planes de Empleo, verdad? Hay que acudir a empresas especializadas. Que poca vergüenza. Y en breve vendrán camiones llenos de pascuelis y pinos, para plantar en los arriates y rotondas del Centro de la ciudad. A despilfarrar y gastar pasta!!!!!