La asociación Septem Nostra ha denunciado la situación en que se encuentra la pequeña cala del Sarchal, donde los escasos usuarios que deciden darse un baño en esta zona, tienen que soportar innumerables residuos que el mar suelta en sus orillas.
Además, estos residuos, en su mayoría proceden de Marruecos (lo que se constata con las etiquetas escritas en árabe) y desde la entidad medioambiental consideran que la propia Unión Europea debe apostar por programas en pro del medio ambiente. “Es necesario que exista un desarrollo sostenible y que Europa también invierta en la mejora de la situación medioambiental en países como Marruecos”, considera el presidente de Septem Nostra, José Manuel Pérez Rivera. A la Ciudad también le corresponde una parte en esta concienciación medioambiental y es por ello que Pérez Rivera aboga por un sistema de limpieza intensiva en estas zonas. “¿A quién le corresponde el saneamiento en el Sarchal? Porque durante todo el año vemos como se van depositando cientos de envases de plástico, bolsas o incluso carritos de la compra y nadie mueve un dedo para solucionar el tema”. El plástico es uno de los residuos que más tardan en descomponerse. Las botellas suelen rondar entre los 100 y los 1.000 años, mientras que las bolsas se sitúan en los 150 años, por lo que su impacto en el medio ambiente es devastador.