Los socialistas ceutíes consideran que con convocatoria electoral “a la vuelta de la esquina” sería una “desafortunada decisión” que el Ministerio de Educación quiera seguir adelante con la implantación de las pruebas en ESO y Bachillerato, “máxime cuando se tiene enfrente 12 Comunidades Autónomas díscolas y una comunidad educativa enojada”.
Para el PSOE, las pruebas al terminar los ciclos en Primaria solo provocan un “estrés innecesario y absurdo” a los alumnos, no solo por la mera realización de la prueba, sino por el tiempo que han tenido que invertir en ensayarlas, pese que el preámbulo de la LOMCE establezca que deberán excluir la posibilidad de cualquier tipo de adiestramiento para su superación. Por ello, y porque en la Evaluación Final de cuarto de Secundaria y la de segundo de Bachillerato, los estudiantes “se la juegan", insisten en que sería una “irresponsabilidad” por parte del ministro “no negociar esta situación y cuanto menos, no paralizarla; permitir esto supondría dejar a miles de alumnos de Secundaria sin la posibilidad de seguir estudiando enseñanzas postobligatorias, y luego que no se quejen de que los jóvenes ni estudian ni trabajan”.
"Este Gobierno lo que ha hecho ha sido poner una cara amable al frente del Ministerio e intentar apagar los fuegos provocados por el Ministro anterior. Pero no, no se dejen engañar, que si salen con mayoría, tenemos LOMCE sí o sí", aseveran concluyendo que, por todo ello, "el PSOE se opone frontalmente a la implantación de las Evaluaciones Finales e insiste en la derogación de la LOMCE que desde que se ha publicado no ha hecho más que provocar enfrentamientos entre el Ministerio de Educación y la comunidad educativa".