Hace ya algún tiempo, se venia escuchando por el sector mas critico del Partido Socialista Obrero Español, que ya no querían a Zapatero como líder del partido, e incluso se rumoreaba que los partidos nacionalistas estarían dispuestos a volver a pactar con el Gobierno si Zapatero desaparecía el mapa político. Todos estos rumores se están confirmando ya que la voluntad de Zapatero es contradictoria a los secretarios generales de las federaciones socialistas regionales. Todo esto ha comenzado con el Partido Socialista Madrileño, donde su Secretario General Tomas Gómez decide presentarse como candidato a la Comunidad de Madrid, en contra del deseo de Zapatero que apoya a Trinidad Jiménez actual Ministra de Sanidad.
Desde que el socialista Joaquín Leguina, perdiera las autonómicas de Madrid en 1995 han pasado casi cuatro legislaturas, y desde entonces la Comunidad de Madrid se ha convertido en uno de los bastiones del Partido Popular. La presión ejercida por la Ejecutiva federal del Partido Socialista Obrero Español y el propio Rodríguez Zapatero para que Tomas Gómez abandone, para evitar unas primarias en el Partido Socialista Madrileño, no han hecho sino enrocar al ex alcalde de Parla. Y todo apunta a que las grietas entre los socialistas madrileños se puedan agrandar.
Todo parece indicar que ambos se enfrentarán el 3 de octubre en unas primarias, tras la decisión de Tomas Gómez de no renunciar a su candidatura, después de que el presidente del Gobierno y líder del Partido Socialista Obrero Español, José Luis Rodríguez Zapatero, se decantara recientemente por Trinidad Jiménez al señalar que tenía una "buena" opinión de Tomás Gómez y una "buena, buenísima" de la ministra de Sanidad.
Claro que de todo esto se puede sacar varias conclusiones, la que mas fuerza esta cogiendo en el mundo político y especialmente entre los socialistas, es que Zapatero quiere empezar a colocar a su personal de confianza en cargos de relevancias pero fuera del Gobierno de la Nación, por dos motivos, el primero, que los Presupuestos Generales del Estado sabe que no los va a sacar adelante ya que no tiene apoyos suficientes para aprobarlos, por tal motivo tendrá que convocar elecciones generales anticipadas, sabiendo que esa decisión será el final del Partido Socialista Obrero Español al frente de España, y la salida de todos los amigos de Zapatero de sus cargos. En segundo lugar, es situar a esas mismas personas de confianza al frente de las federaciones regionales socialistas, para volver a presentarse como Secretario General del Partido Socialista Obrero Español, ya que si se tuviera que presentar actualmente perdería la secretaria nacional, teniendo que irse a su casa por la puesta de atrás de la política nacional y como líder de su partido.
Nos creíamos los españoles que Zapatero se quedaba sin vacaciones porque iba a trabajar en materia económica, iba a dedicarse a resolver el problema del paro o iba a intentar ganar credibilidad internacional. No más lejos de la realidad, Zapatero se ha quedado sin vacaciones para montarle un lío a Tomás Gómez en la Federación Socialista Madrileña cuando lo que necesitamos en España es que Zapatero se ocupe del paro. En este momento hay una crisis de Gobierno latente, abierta. Una crisis de gobierno reality show en la que, con una transparencia asombrosa, estamos viendo todos los movimientos que practica un presidente del Gobierno que se ha quedado políticamente desnudo ante su partido y ante los ciudadanos.
La dimisión de Trinidad Jiménez debe ser inmediata, no puede ocuparse de algo tan importante como es la salud de los españoles si está dedicada a ganarle unas primarias a Tomás Gómez. O se está a las primarias de Madrid o se está al Ministerio de Sanidad.
Zapatero se ha colocado de una manera irresponsable en una situación de máximo riesgo. Es un presidente del Gobierno que no tiene suficiente respaldo parlamentario, es el presidente de un Gobierno de coalición entre los socialistas nacional y los socialistas catalanes, en el que los socialistas catalanes cada vez se aleja más del Partido Socialista Obrero Español, no tiene respaldo internacional ni crédito ante los mercados, nunca un presidente del Gobierno de España estuvo tan bajo en las encuestas. Y en esa situación se abre él mismo una crisis interna en la Federación Socialista Madrileña.
Ahora se abre una serie de interrogantes, ¿Y si Tomás Gómez le gana las primarias a Zapatero?, ¿qué pasará?, ¿en qué situación queda el presidente del Gobierno?, Zapatero lo que necesita es toneladas de prestigio y no añadirse él mismo un poco más de descrédito. En el Partido Socialista Obrero Español se le ha perdido el respeto a Zapatero y eso le deslegitima. Hemos visto a Barreda pedir cambios en el Gobierno y a Griñán, como si fuera del Partido Popular, decirle a Zapatero que salga a la calle. Y ahora vemos que Tomás Gómez le echa un pulso. Necesitamos un presidente que como mínimo tenga autoridad en su propio partido.
La cruda realidad es más sencilla de lo que parece, necesitamos un nuevo Presidente del Gobierno, un nuevo proyecto político y un equipo de Gobierno que sepa lo que hace, necesitamos al Partido Popular en el Gobierno de España “YA”.