El PDSC se ha hecho eco de las quejas de los vecinos de Martínez Catena, una zona en la que existen más de 70 viviendas y habitan alrededor de 500 personas, que han mostrado su malestar por el estado de la calzada y la carretera por la que, aseguran, los vehículos circulan a una velocidad excesiva, sin que, además, exista señalización o pasos de peatones. Las frecuentes inundaciones en época de lluvias son también parte de las quejas de estos vecinos que demandan una solución urgente. El alumbrado público se configura como otro de los problemas que viven los vecinos, ya que hay carencia de puntos de luz, además de no existir marquesinas ni señalización de la parada de autobús. En cuanto a la limpieza, los residentes de la zona tienen grandes quejas de la misma al ser insuficiente. A estas quejas se suman la ausencia de zonas verdes o de ocio para niños y jóvenes; así como los precarios accesos a la mezquita y los vehículos abandonados.