Tres son las actividades dirigidas a personal sanitario y no sanitario que el Instituto de Formación en Emergencias ha organizado en la ciudad entre el 16 y el 18 de enero: ‘Soporte Vital Básico’, ‘Soporte Vital Avanzado’, y ‘Proveedor e Instructor de Soporte Vital Básico’. Con el objetivo de disminuir la mortalidad y las secuelas que ocasionan las paradas cardíacas, difundir las técnicas de soporte vital entre los posibles primeros intervinientes, y facilitar a éstos la integración en la cadena de supervivencia, el miércoles, 16 de enero, se celebrará el curso ‘Soporte Vital Básico’. Esta actividad, que también busca difundir normas básicas para la prevención de la enfermedad coronaria y de la muerte súbita cardiaca, se extenderá durante ocho horas y cuenta con 24 plazas destinadas a personal no sanitario o bomberos, entre otros.
Este ciclo, que será impartido por los profesores José María Ruiz Pellejero y Tomás Gómez Alonso, también persigue la finalidad de identificar situaciones de riesgo vital diferentes a la parada cardiorrespiratoria, saber cuándo y cómo se debe poner en marcha el Sistema Integral de Emergencias, y aplicar las técnicas y habilidades necesarias para el tratamiento de la parada respiratoria y la obstrucción de la vía aérea.
El Instituto de Formación en Emergencias tiene previsto celebrar, entre el 16 y el 17 de enero, el ‘Curso de Proveedor e Instructor en Soporte Vital Básico’, que tiene su razón de ser cualificarse para hacerse formador de formadores y extender las técnicas de uso del soporte vital avanzado a las personas que estén interesadas en adquirir este tipo de conocimientos. Para ello, las bases de las diferentes técnicas que se realizan en situaciones de parada cardiorrespiratoria deben estar asentadas.
Pese a que, por el momento, el emplazamiento de estas actividades formativas está por determinar, el mismo día, 16 de enero, comenzará el curso de ‘Soporte Vital Avanzado’. Dirigido a médicos y enfermeros, este curso que se extenderá hasta el viernes, 18 de enero, tiene por objeto aportar los conocimientos necesarios para poder realizar una primera atención cualificada de la parada cardiaca. Por ello, al finalizar el curso los 24 alumnos deben ser capaces de identificar una parada cardiorrespiratoria; conocer la cadena de supervivencia; conocer los fundamentos bioéticos de la RCP; aplicar la RCP básica; aislar una vía venosa; realizar la entubación endotraqueal y sus alternativas; e identificar y diagnosticar las arritmias graves. Los participantes también deberán estar preparados para realizar una desfibrilación manual y semiautomática.