“El hecho de ir a correr es un descanso más que una obligación”

Le gusta más escribir que hablar y se desenvuelve mejor corriendo que ante un micrófono. Sin embargo, tiene unos principios muy claros y convincentes ya que no antepone un triunfo en una carrera a estar con su familia pero cuando se trata de competir se sacrifica al máximo para quedar lo más alto posible, por afán de superación.
Se trata de María Bohórquez Vez (Ceuta, 1980), la más pequeña de una familia de cuatro hermanos -su padre es ceutí y su madre gallega- que ha convertido el atletismo y el triatlón en sus formas de dejar aparcada la realidad diaria para buscar la relajación en la carretera.
Tiene asumido que correr es una relajación y no un sacrificio, se siente atleta desde que a los ocho años acompañaba a su padre a las pruebas y valora tener una estabilidad laboral (es directora comercial en el BBVA desde el año 2005) para poder dar rienda suelta a su pasión por el deporte.
Cuando puede practica trekking acompañada por su marido Ismael y su hijo Javier, de solo tres años, lo que le hace dejar en un segundo plano su ambición por ganar, a pesar de que cuando se viste de corto siempre tiene en mente el triunfo.

–¿De dónde nace esta afición por el atletismo?
–Mi padre era muy deportista, siempre intentaba llevarme a correr o a jugar al tenis pero también estaba muy preocupado por los estudios, al igual que mi madre.
–¿Y les hicistes caso?
–Sí, he sido una buena estudiante aunque pasé un tiempo más rebelde, como todos los chicos. Lo que más me gustaba era la gimnasia y lo que menos la física y química. Me crié en las Puertas del Campo en una época donde los juegos de calle era lo que prevalecía.
–¿Por qué estudias Empresariales?
–En principio no quería estudiar ninguna carrera ya que pretendía prepararme para el Ministerio de Defensa pero debía elegir entre Magisterio y Empresariales y como mi hermana mayor trabaja en la banca quise seguir sus pasos.
–¿Cómo fue la experiencia universitaria?
–Me gustó mucho ya que me encantaba la contabilidad. De hecho, cuando me diplomé quise seguir a buscar la licenciatura y me marché a Granada para estudiar Administración y Dirección de Empresas, siendo una experiencia inmejorable porque allí volví a vivir el ambiente deportivo.
–¿Te ayudó Granada a seguir tu afición por el atletismo?
–Sí porque siempre había gente haciendo deporte a cualquier hora del día. Empecé haciendo atletismo, natación y bicicleta por hobbie y la mayoría de las veces salía sola pero luego me encontraba con algún grupo de personas, es decir, me iba a correr sola y acababa con algún grupo.
–¿Cuándo regresas a Ceuta?
–Nada más terminar la carrera con la suerte de que al mes entré en el BBVA y me cambió la vida porque, al mismo tiempo, mi marido también encontró trabajo.
–¿Qué te ha dado el atletismo?
–Libertad y relajación porque irme a correr en lugar de ser una obligación es un descanso, de hecho estuve dos años sin hacer nada porque tuve a mi hijo y la verdad es que lo echaba de menos.
–¿Cuáles son las cosas buenas y las malas de este deporte en una ciudad como Ceuta?
–Lo bueno es que nos conocemos todos y las zonas bonitas para correr pero faltan lugares para poder practicarlo. Me da pena que no adecuen el pantano del Renegado para correr a todas horas porque en invierno no se puede correr allí a partir de las seis de la tarde.
–¿Le has cogido el gusto a ganar carreras?
–Últimamente se me está dando bien las cosas ya que el año pasado logré el segundo puesto en los 101 kilómetros de Ronda, luego quedé tercera de mi categoría en los 50 kilómetros de Benaoján y también he ganado en pruebas como la San Silvestre, la Benzú-Plaza de África o la Vuelta al Hacho.
–¿Qué prueba te llama más la atención?
–La Vuelta al Hacho porque me gusta la subida ya que las demás son muy explosivas y en ésta te separas más de las contrincantes y, además, las vistas son espectaculares.
–¿Eres una corredora de mirar mucho las marcas?
–Sí, me gusta hacer buenos tiempos porque tengo un espíritu competitivo pero no corro por marcas sino por sensaciones.
–¿Qué sensación te haría no participar en una carrera?
–Si no tengo ningún problema físico o familia no habría motivo alguno. Todavía no he participado en la Vuelta a Ceuta pero nunca he estado aquí cuando se ha disputado, pero tengo ganas de correr esta prueba.
–¿Qué victoria te ha llenado más de orgullo?
–Más que un triunfo fue terminar los 101 kilómetros de Ronda porque es una competición muy dura así como mi última victoria en la Media Maratón donde estuve codo a codo con Teresa Marín, con la que tuve un duelo muy bonito hasta el final. Hice una hora y treinta y cuatro minutos aunque pensaba que había invertido menos tiempo.
–¿A qué nivel se encuentra el atletismo femenino?
–Alto porque hay más chicas que hace unos años como María Dolores Vera, Susana Román, Teresa Marín o Nisrin, es decir, son atletas que siempre están ahí y ganar no es fácil. Susana Román ha fomentado mucho el deporte femenino en los últimos años así como ahora se ha unido el padre agustino Jesús.
–¿Qué hace falta para mejorar el panorama local?
–Primero la pista de atletismo y luego entrenadores y adecuar zonas de carrera para el invierno. Ceuta es una tierra de atletas y sólo hace falta un empujón ya que aquí uno entrena por su cuenta y, por ello, destaco la actitud de corredores como Javi Ocaña que es un ejemplo de constancia y saber estar.
–¿Qué retos tienes a la vista?
–Seguir compitiendo y hacer los 101 kilómetros de Ronda a pié porque el año pasado lo hice en duatlón. A nivel local intentaré estar en las pruebas que pueda ya que el calendario es muy completo.
–Por último ¿Qué opina tu familia de todo ésto?
–Siempre me han apoyado, de hecho mi marido es un continuo apoyo porque siempre me anima y me prepara los entrenamientos. Me encantaría que mi hijo practicara deporte pero le apoyaré en lo que decida en el futuro.

“Me da mucha pena que el triatlón se encuentre de capa caída porque es una modalidad muy bonita”

TRIATLÓN. María es una firme defensora del triatlón, por lo que lamenta que esta modalidad deportiva no tenga más seguidores a nivel local.
“Me da mucha pena que esté de capa caída porque las pruebas se han rebajado de siete u ocho al año a cuatro, hay menos participantes y ha decaído sin saber los motivos”, ha señalado.
En este sentido, puntualiza que esta modalidad “es muy bonita y lo recomiendo porque es muy completo y ameno porque practicas tres deportes”.
En su opinión, este deporte “necesita más impulso porque hay buenos triatletas que han competido a nivel nacional con buenos puestos pero la cantera está floja. Hubo una época en la que se fomentó un poco más pero ahora lleva unos años estancado”.
Actualmente, está practicando el duatlon. “No tengo tiempo de ir a nadar y también reconozco que la natación es la disciplina que menos me gusta”.
Agradece la presencia en las pruebas de atletas marroquíes. “Es un aliciente porque ponen unos ritmos altos y nos esforzamos más. A nivel femenino vienen menos pero son muy fuertes”.
A la hora de hablar sobre sus entrenamientos nos dice: “entreno una hora al día de lunes a viernes y los fines de semana dos. Soy muy competitiva y constante pero lo practico porque me gusta. Ahora me gustan más las distancias largas y en la prueba donde estoy más a gusto es en los diez kilómetros”.
Por último, se refiere a las cualidades de una buena atleta. “Al margen de una buena condición física hay que tener constancia, mentalidad y ganas de superación. Además, para determinadas pruebas debes tener una buena capacidad mental”.