Vivas trasladará hoy en su encuentro con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los principales problemas y necesidades de Ceuta, en una cita que se enmarca en las visitas protocolarias que ya ha mantenido con los mandatarios de las comunidades autónomas.
Hoy le toca el turno a Ceuta y también a Melilla, cada uno por separado, pero llevando debajo del brazo problemas que les son comunes. La inmigración, la lejanía de la península, los condicionantes derivados de su extrapeninsularidad, lastres económicos, frontera... Ceuta y Melilla deben tener los mismos derechos que el resto de los españoles, sus residentes no tienen por qué soportar algunos déficit que vienen marcados por su mera condición geográfica.
Y esto debe ser tenido en cuenta por el presidente del Gobierno, cuya obligación es la de garantizar que sus ciudadanos de Ceuta y Melilla no tengan lastres por vivir en estas tierras españolas, cuyo sentir patriótico y de defensa de la nación ha quedado bien demostrado.
Vivas sabe que en Ceuta hay problemas graves y enquistados, se los trasladará al presidente Sánchez siempre dentro de los márgenes de lealtad institucional que siempre ha sabido defender el presidente de los ceutíes. Su partido es el PP, su ideología es la afín a esas siglas, pero Vivas es ante todo presidente de todos los ceutíes, hayan votado a quien hayan votado, y tiene a gala defender primero su tierra anteponiendo intereses partidistas.
Sánchez encontrará en Vivas a un presidente que le traslada las peticiones de una tierra que se merece una atención especial del Gobierno de la Nación, una atención comprometida y permanente además de estructural.