El treinta por ciento de los fallecidos y que son factibles de enterrar en el cementerio de Santa Catalina son incinerados, según fuentes de la Ciudad Autónoma.
Así, por ejemplo, nos encontramos que de cuatrocientos cincuenta y tres personas que fallecieron a lo largo del año pasado, ciento treinta y cinco fueron llevados directamente desde el tanatorio hasta la cremación. Exactamente es algo más de un veintiocho por ciento.
Hay que destacar que en los últimos años el servicio de cremación ha sufrido un importante incremento como consecuencia de las propias peticiones de los familiares de las personas que fallecen.
Por supuesto, en una estsdística global de todos los ciudadanos de Ceuta que murieron el año pasado, los que fueron incinerados bajaría hasta algo más de un diez por ciento, porque no podemos olvidar que todos los musulmanes son enterrados, ya que su religión no permite la cremación.
Ya con referencia concreta al propio cementerio católico, indicar que por parte de la Ciudad Autónoma se quiere realizar un licitación para el mes de septiembre con la intención de construir aproximadamente unos setecientos cincuenta nichos más. Con esta previsión estarían garantizados los enterramientos para un período aproximado de unos cuatro o cinco años.
Además, entre los trabajos que también tienen pendientes en el negociado de cementerios se encuentra el traslado de dos galerías que se encuentran prácticamente en ruinas y deberán ser demolidas, espacio q ue con posterioridad podrá ser recuperado con nuevos nichos.
Tiempo
Ahora mismo, hay todavía tiempo más que suficiente de expectativas, porque se cuenta con margen de un par de años.
En esa licitación que se quiere para el mes de septiembre se confía que para marzo o abril del año que viene ya se pueda contar con esos setecientos cincuenta nichos que cubran las necesidades previstas para el próximo quinquenio.
De todas maneras, con el espacio de Santa Catalina actual no hay muchos problemas para poder continuar durante varios decenios sin necesidad de incrementar el espacio actual, que ya tuvo su última ampliación hace aproximadamente unos quince años.
Varias fases para ampliar Sidi Embarek
Los mismos argumentos está utlizando al Ciudad Autónoma para garantizar los enterramientos en el cementerio musulmán de Sidi Embarek para varios años. Es la Gerencia de Infraestructuras y Urbanismo (GIUCE) la que se está encargando. Ahora mismo se está desarrollando ya la primera de las ampliaciones previstas, de manera que cuando acaben los trabajos se garantizarán los enterramientos aproximadamente para unos dos años más o menos.
Sin embargo, los propios técnicos de este departamento ya han informado que no habrá problemas para futuras ampliaciones que ya se están preparando con tiempo para que se puedan ejecutar.
En cuanto a espacio se considera que el cementerio de Sidi Embarek todavía podrá estar en activo aproximadamente unos diez años, por lo que a partir de esa fecha no quedará más remedio que buscar una nueva parcela que se pueda utilizar con perspectivas para varios decenios por delante y sin problemas. .
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