La Comandancia de la
Guardia Civil de
Melilla ya ha comenzado a utilizar drones dotados de
inteligencia artificial que Interior también quiere emplear en Ceuta. Se trata de aeronaves no tripuladas Matrice 300RTK, de alta capacidad y con tecnología aviónica y gestión de estado. En el caso de la ciudad hermana, se cuenta ya con tres drones de este tipo controlados por un equipo de agentes. Esos efectivos del Instituto Armado han cursado un programa de formación a cargo de agentes especializados del Servicio Aéreo de la Guardia Civil. Es lo que también se quiere imponer en Ceuta, que contará con drones y cámaras. Tal y como ya informó este periódico hace meses, existe un informe que cifra el gasto en casi 7 millones de euros para aumentar la seguridad en la valla.
Las pruebas de detección en Ceuta
De momento en Ceuta se trabaja con el equipo Pegaso y el manejo de los drones actuales, pero los que estén dotados de IA irán con el
nuevo sistema que ya está en pruebas. Con la inteligencia artificial se quiere contar con información sobre los acercamientos al vallado, que se sepa si se trata de personas o, por ejemplo, pájaros o cualquier especie animal. Se está evaluando también la fiabilidad de los sensores. Con la disposición de un radar con capacidad de alcanzar hasta 450 metros se pasaría de la detección a la activación de una cámara que puede enfocar directamente al punto señalado por ese radar. Sobre plano se contempla la ubicación de cuatro torretas con drones que aportarían imagen al momento del punto de la incidencia. Una suerte de medios tecnológicos que centran sus funciones en avisar y que aportarían tecnología actualizada a la valla. En el último intento de entrada de inmigrantes
se emplearon como nuevos recursos las esclusas.