La Consejería de Gobernación, que el año pasado adquirió tres cubas nuevas para el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) que se recibieron con una capacidad real inferior a la contratada, prevé recibir pronto de vuelta en condiciones óptimas las dos que ya ha enviado a Pontevedra para que la empresa constructora las acondicione de acuerdo a las características establecidas: para poder transportar 2.500 y 1.500 litros, respectivamente.
Según indicó ayer a ‘El Faro’ el titular del departamento, Jacob Hachuel, cuando el Cuerpo de Bomberos disponga de esos dos vehículos se enviará a Galicia la de mayor capacidad (5.000 litros) con el fin de que se efectúe en ella una operación similar.
El Gobierno de Vivas presentó en Navidad los nuevos vehículos de la flota del SEIS: un vehículo de intervención ligera (pick up), una auto-escalera automática, una bomba urbana ligera con 1.500 litros de agua de capacidad, una bomba urbana pesada (2.500) y una rural pesada (5.000).
En apenas un mes, los bomberos se dieron cuenta durante la realización de algunos servicios de que las cubas “se agotaban antes de lo esperado”.
La Consejería de Gobernación ordenó entonces realizar una medición exhaustiva para conocer si la capacidad de las cubas se correspondía o no con la que figuraba en el pliego de condiciones de la licitación, así como la instrucción de un procedimiento administrativo cuando con un caudalímetro se certificó que en el vehículo que debería transportar 1.500 litros solo cabían mil; que al de 2.500 le entraban únicamente 1.850; y que al de 5.000 le faltaba capacidad para albergar 480 litros.
El Ejecutivo local todos los vehículos en un lote de 'renting' adjudicado al BBVA por 1,47 millones de euros, aunque la suministradora de los camiones era ‘Incipresa', según dijo Hachuel una compañía “líder” en el sector de abastecimiento a Cuerpos de Bomberos no solo en España sino también en Europa.
La suministradora, filial de un grupo “líder mundial” Fundada en 1985, ‘Incipresa’ es una filial del grupo de empresas alemán ‘Minimax-Viking’ con más de 100 años de experiencia que presume de que hoy es “líder mundial en la protección y lucha contra incendios”. Dispone de una planta de fabricación situada en Mos (Pontevedra) con una superficie total de 18.000 metros cuadrados en la que, además de la fabricación, localiza los departamentos de compras, almacenes, distribución, etcétera.