AUGC denuncia que los prolongados plazos de entrega de las uniformidades destinadas a los guardias civiles, entre ellos los de Ceuta, causan una problemática que afecta directamente a la efectividad y dignidad del trabajo de los profesionales.
En este sentido, critican que son muchas las quejas de los agentes “que llevan cerca de dos años sin recibir renovaciones de su vestuario” y añaden que la situación se agrava al constatar que, en muchas ocasiones, “los propios agentes se ven obligados a organizar peticiones formales para solicitar las prendas necesarias, un proceso que puede extenderse entre tres y cuatro años”.
Como ejemplo ponen el caso de los pantalones y polos técnicos que, pese a ser básicos, “llegan con una demora injustificable, obligando al personal a trabajar con prendas desgastadas que no cumplen las condiciones óptimas de protección.
“Actualmente el sistema utilizado para gestionar la distribución y el aprovisionamiento de material en la Guardia Civil, incluida la vestimenta de los agentes se llama ALFIL (Aplicación Logística-Financiera Integral)”, señalan.
Pero, sin embargo, las licencias disponibles para acceder a este sistema son limitadas, “lo que provoca demoras significativas en la entrega de uniformes”.
“Este problema afecta a muchas unidades, donde los guardias civiles deben esperar años para recibir el vestuario necesario, lo que impacta negativamente en su desempeño y dignidad profesional”, expresan desde la asociación.
Asimismo, con la llegada del invierno indican que “hay un elevado número de guardias civiles que, tras haber solicitado polos de manga larga hace dos o incluso tres temporadas, se ven de nuevo desprotegidos ante el frío” y la falta de respuesta obliga a los agentes a recurrir “a polos deteriorados o anticuados”.
En la misma línea, apuntan también que esta circunstancia les obliga a tener “una imagen que no corresponde con los estándares que debería tener la institución que representan”.
“Es inadmisible que los guardias civiles, quienes velan por la seguridad y el bienestar de la ciudadanía, se enfrenten a estas carencias materiales que comprometen su desempeño y dignidad profesional”, critican desde AUGC.
Piden un nuevo proceso de selección
“Desde AUGC consideramos que este problema no solo refleja ineficiencia en los procesos de distribución, sino que evidencia la necesidad de reformar el sistema actual de selección y adquisición de estas prendas”, lamentan.
Es por ello que reclaman “con urgencia” un nuevo proceso de selección de vestuario que sea más eficiente y adaptado a las necesidades reales de los guardias civiles, “que permita garantizar la calidad, funcionalidad y rapidez en la entrega”.