Las autoridades marroquíes detuvieron este domingo por la noche en Casablanca a 23 personas por disturbios durante y después de un partido de la liga de fútbol del país magrebí que enfrentó al Raja de Casablanca y el OC Safi, según informó este lunes la policía de dicho país.
Se trata de la tercera operación policial por incidentes en partidos de la liga marroquí, tras los 12 arrestados el pasado jueves en la ciudad norteña de Oujda, por provocar disturbios antes de un encuentro, y los 81 detenidos el viernes en Rabat en prevención de que se pudieran producir.
Según el informa este lunes la policía marroquí en un comunicado, a los detenidos de este domingo en Casablanca, la principal ciudad del país, se les atribuyen disturbios durante y después del partido, situaciones en específico que la nota no detalla.
Además, se arrestó a otras 36 personas por posesión de billetes falsos y se incautó un automóvil cuyos propietarios tenían un cuchillo de gran tamaño. Entre los detenidos había cinco menores, puestos bajo vigilancia, y el resto están siendo investigados por la Fiscalía competente.
Cabe mencionar que en Marruecos son habituales los disturbios provocados por los grupos ultras, especialmente por los que apoyan a los dos grandes clubes de Casablanca, el Raja y el Wydad. De hecho, como se indica, en los últimos días las actuaciones policiales han sido necesarias no solo en este último caso, sino también tras los incidentes en dos partidos más disputados días antes.
Erradicar la violencia en el ámbito futbolístico es, para Marruecos, uno de los grandes retos deportivos que se deben afrontar ya que este tipo de situaciones empañan la fiesta del deporte más seguido a nivel nacional, el fútbol. Además, el hecho de que a menudo haya menores involucrados en los enfrentamientos deja entrever también que se trata de una cuestión educativa que hay que afrontar con políticas serias e integrales.