Una mujer, de nacionalidad marroquí, N.A., fue condenada ayer a un año, un mes y diez días de prisión por un delito contra la salud pública, es decir, tráfico de drogas. La mujer se reconoció culpable de los hechos y se le aplicó incluso el atenuante de colaboración con la Justicia, pero la condena llevó consigo la expulsión del territorio nacional por un periodo de diez años. Un extremo que la acusada no aceptó, pues alegaba que tenía arraigo en España y reside en la localidad madrileña de Fuenlabrada, pero la sentencia ya era firme.
La abogada de la defensa anunció su intención de recurrir la decisión de la juez, a pesar de que su cliente se había declarado culpable de haber tratado de llegar a la península con cerca de un kilo de hachís en el interior de su cuerpo.
Por otra parte, la titular del Juzgado de lo Penal 1 de nuestra ciudad condenó ayer a tres años y ocho meses de cárcel a un hombre, H.A., por el mismo delito tras ser interceptado en el puerto de Ceuta con más de 45 kilos de hachís ocultos en un doble fondo practicado en el techo del vehículo que conducía.
El español, J.Mª. G.B. también se mostró conforme con una pena de tres años y dos meses de prisión por un delito de tráfico de drogas, tras haber sido sorprendido con más de 18 kilos de hachís que llevaba ocultos en el depósito de combustible del coche que conducía. Trataba de embarcar en el puerto con destino a la península.