La Policía Judicial de Marruecos detuvo, el pasado lunes en Casablanca, en estrecha coordinación con los servicios de la Dirección General de Vigilancia del Territorio, a un empleado de un centro de llamadas sospechoso de estar implicado en actos de extorsión cibernética y de amenazar con atentar contra el orden público.
Según los datos preliminares de la investigación que se está llevando a cabo por parte del organismo de seguridad, este individuo de 42 años de edad es sospechoso de haber enviado correos electrónicos a varios establecimientos hoteleros, de servicios y de enseñanza en del país vecino y en el extranjero.
En estos envíos el sospechoso reclama sumas de dinero para no ejecutar falsas amenazas de atentados terroristas contra ellos, según ha indicado la Dirección General de la Seguridad Nacional en un comunicado.
Las investigaciones sobre el terreno y los peritajes técnicos permitieron a los agentes la identificación y la detención del sospechoso en la ciudad de Casablanca. Además, revelaron que los correos electrónicos enviados contenían el número de cuenta bancaria de una persona natural de Marruecos residente en el extranjero.
La intención no era otra que la de vengarse de este último por las diferencias que les han enfrentado en anteriores transacciones comerciales, ha añadido la misma fuente citada anteriormente.
Incautación de material informático y soportes de almacenamiento digital
Los registros realizados en el marco de este caso permitieron la incautación de diverso material informático y de soportes de almacenamiento digital, que actualmente son objeto de un peritaje técnico para descubrir posibles pruebas en relación con estos actos criminales llevados a cabo.
El sospechoso ha sido puesto bajo custodia a efectos de la pertinente investigación judicial, que se está llevando a cabo bajo la supervisión de la fiscalía competente para dilucidar los diferentes entresijos de este caso en concreto, ha concluido el comunicado.