España en marcha: Nosotros somos quien somos. / ¡Basta de Historia y de cuentos! / ¡Allá los muertos! Que entierren como Dios manda a sus muertos. Ni vivimos del pasado, / ni damos cuerda al recuerdo. /Somos, turbia y fresca, un agua que atropella sus comienzos. / Somos el ser que se crece. / Somos un río derecho. / Somos el golpe temible de un corazón no resuelto. /Somos bárbaros, sencillos. /Somos a muerte lo ibero/que aún nunca logró mostrarse puro, entero y verdadero. /De cuanto fue nos nutrimos,/ transformándonos crecemos/ así somos quienes somos golpe a golpe y muerto a muerto./ ¡A la calle! que ya es hora/de pasearnos a cuerpo/y mostrar que, pues vivimos, anunciamos algo nuevo./No reniego de mi origen/pero digo que seremos/mucho más que lo sabido, los factores de un comienzo./Españoles con futuro/y españoles que, por serlo,/aunque encarnan lo pasado no pueden darlo por bueno./Recuerdo nuestros errores/con mala saña y buen viento./Ira y luz, padre de España, vuelvo a arrancarte del sueño./Vuelvo a decirte quién eres./Vuelvo a pensarte, suspenso./Vuelvo a luchar como importa y a empezar por lo que empiezo./No quiero justificarte/como haría un leguleyo, Quisiera ser un poeta y escribir tu primer verso. España mía, combate/que atormentas mis adentros, /para salvarme y salvarte, con amor te deletreo.
De: Cantos iberos, 1955. Gabriel Celaya (1911-1991)
- Resulta que fuimos a visitar a nuestra vecina Pepa -86 primaveras-, que me apuntaron que llevaba días postrada en la cama a causa de sus diferentes males -que son muchos y nada halagüeños-; y, la visitamos con gorra, mascarilla en ristre y bastón de apoyo...
- Y, quiera para mi sorpresa -me avisaron los vecinos-, que a Pepa se la llevaron en una ambulancia para el hospital, por ser portadora del Coronavirus (Covid-19). Sorpresa y tristeza...
- A las pocas horas llamada del Servicio Sanitario, para apuntarme que debía guardar confinamiento* por haber estado un rato en casa de la encartada, y que en los próximos días pasarían a hacerme el consiguiente test para controlar si estaba contagiado o no del susodicho virus.
- Más sorpresa aún y el consiguiente aturdimiento propios de los largos 14 días de confinamiento que estaban por llegar...
- Y, bien, aceptamos con resignación esta «ruleta rusa", que el destino y la causalidad nos ha hecho llegar; sin embargo, no aceptamos de buen grado -creo que es de justicia-, que, en 7 días de habitar entre cuatro paredes, nadie haya llamado para preguntar en qué estado me encuentro, ni sé contaba con víveres para pasar estos 14 días, de los qué, afortunadamente, ya hemos pasado 7 de ellos...
- Sí, por suerte, aún estamos vivos, sin síntomas de la enfermedad, y con la dichosa prueba realizada, con resultado negativo...
- Sin embargo, no es de recibo este comportamiento de las Autoridades Sanitarias, que el abandono hecho a mi persona seguramente será extensible a muchas otras...
- Qué sabe nadie del dolor de sentirse abandonado... De la sensación de sentirse «invisible», de que no existes, de que hasta Dios ha cerrado sus puertas en su palacio de cristal más allá de las nubes y el cielo azul... Y, hemos aprendido la lección: porque ya no será nadie «invisible» para mí.... Sí; qué sabe nadie...
- Así es nuestro país -miserable España- que son prestos y veloces en dar órdenes de confinamiento; y, sin embargo, lentos e indolentes en atender al ciudadano, que se tiene que comerse la soledad a «bocaos»...
(*) SOBRE EL CONFINAMIENTO Y CUARENTENA (Comunidad de Euskadi)
¿Qué es el confinamiento y la cuarentena? ¿Por qué es tan importante?
Es la separación y restricción de movimientos impuesta a una persona o grupo de personas. El objetivo principal del confinamiento o la cuarentena es lograr frenar y controlar la transmisión de la infección, evitando así los contagios y controlando la expansión. En este momento es especialmente importante para poder garantizar la atención sanitaria necesaria y oportuna a todos los casos. ¿En qué se diferencia la cuarentena y el confinamiento
El confinamiento viene impuesto por el decreto del gobierno para toda la ciudadanía. Durante el confinamiento se podrá salir de casa para aquellos supuestos en los que ha dado permiso según la fase de desescalado en la que se encuentre la provincia.
En cambio, aquellas personas que están en cuarentena impuesta por el personal sanitario, debido a que son positivas al COVID-19 o han sido contactos estrechos, NO podrán salir de casa mientras esta dure.
¿Qué hay que hacer al llegar a casa?
Quítate los zapatos al entrar en casa
Deja bolso, llaves, cartera, móvil, etc. en un rincón junto a la entrada (caja o similar) y desinféctalos
Si has sacado juguetes límpialos antes de volver a meterlos en casa. Evita sacar aquellos que se limpien con dificultad
Lávate las manos
Quítate la ropa y no la sacudas
Lava la ropa, especialmente si has estado en lugares cerrados y concurridos. (Información Comunidad de Euskadi)
(http://www.euskadi.eus/aislamiento-domiciliario/web01-a2korona/es/)
CONFINAMIENTO Y VIOLENCIA DE GÉNERO (Comunidad de Madrid)
El confinamiento durante la pandemia supone mayor exposición de las mujeres a la violencia y por tanto su salud puede verse agravada. El mayor tiempo de convivencia con el maltratador facilita el control y las agresiones.
El aislamiento de las mujeres puede modificar las formas de maltrato, como por ejemplo negar el apoyo para cubrir las necesidades básicas de la mujer con síntomas que está aislada en el domicilio.
No quites importancia a la violencia en esta situación de alarma social.
Mantén el contacto con una persona de tu confianza que te pueda ayudar cuando lo necesites.
Recuerda que existen personas que pueden atenderte en alguno de estos recursos:
1.- Recursos frente la violencia de género estatales, regionales, municipales y otras entidades.
2.- Recursos de la D.G. de Igualdad, Red violencia de género, Comunidad de Madrid, estado de alarma.
Si tienes miedo o crees que estás en riesgo llama al teléfono de emergencias 112, a la policía 091 o guardia civil 062. Recuerda que no estás sola y que puedes recibir ayuda.
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Confinamiento y juego problemático
El aburrimiento o la ansiedad, en personas que antes no tenían un problema con el juego, o la dependencia si es que ya habían tenido este problema, pueden conducir a desarrollar ludopatía. No hay que quitar importancia a estos comportamientos ni buscar excusas pensando que será algo temporal.
La experiencia nos dice que engancharse no es difícil, lo difícil es dejarlo, ya que las distorsiones de pensamiento que acompañan esta adicción, el impulso a jugar, las creencias erróneas de que jugando se puede recuperar lo perdido y otras trampas conductuales que encadenan a la adicción, hacen difícil salir de ella, aun teniendo enormes costes económicos, familiares y personales para el adicto al juego.
Ante la oferta de actividades en internet y redes sociales es aconsejable:
Elegir las actividades con responsabilidad.
Proteger a nuestros hijos de los riesgos derivados de su uso.
Evitar actividades que puedan ocasionar problemas actuales o futuros.
El aburrimiento o la ansiedad, en personas que antes no tenían un problema con el juego, o la dependencia, si es que ya habían tenido este problema, pueden conducir a desarrollar una conducta de juego problemático.
No hay que quitar importancia a estos comportamientos ni buscar excusas pensando que será algo temporal.