La Policía Nacional ha llevado a cabo los arrestos de tres personas, dos de ellos menores de edad, por su presunta relación con la desaparición y muerte de Mohamed Alí, el joven de Ceuta del que no hay rastro desde enero de 2022, cuando su madre puso denuncia en la Jefatura Superior.
Por aquel entonces tenía 17 años. Vecino de la barriada de El Gallo, durante todo este tiempo su familia no ha cesado en la búsqueda. Los tres detenidos están presuntamente relacionados con un delito de homicidio. Se trata de dos chicos y una chica, vecinos del Príncipe y de Los Rosales. El considerado presunto autor de los hechos es un menor que desde esta misma tarde se encuentra junto con los otros dos jóvenes en dependencias policiales.
Un año ha sido el tiempo en el que la Policía Nacional ha mantenido abiertas todas las investigaciones, protegidas por el secreto de sumario. Unas investigaciones complicadas porque se ha pretendido enturbiarlas en todo momento, haciendo ver que el joven se encontraba en la Península con otros más.
De hecho se publicaban comentarios en redes sociales o se colgaban vídeos para difundir una marcha voluntaria de Ceuta, con permanencia del chico en zonas del sur peninsular. Fueron maniobras que buscaban cansar a la familia de Mohamed Alí pero también desviar la atención de las fuerzas de seguridad.
Hoy, a poco de cumplirse un año de los hechos, la Policía ha practicado las tres primeras detenciones de un caso marcado por la incertidumbre ya que no aparece el cuerpo del joven, que ya es mayor de edad. De los interrogatorios de los detenidos se intentará esclarecer este caso. Los tres están detenidos por homicidio.
El día de su desaparición llevaba una pantalón negro, calzado deportivo del mismo color y una chaqueta gris reflectante. Las llamadas insistentes de su madre no dieron fruto ya que el teléfono móvil estaba apagado. La familia siempre mantuvo que podía estar retenido contra su voluntad.
Se hicieron batidas por toda Ceuta en las que colaboró Protección Civil mientras la Policía seguía varios rastros en unas investigaciones muy complicadas. En aquellas batidas siempre estaba Asma, la madre del joven, así como vecinos y familiares próximos.
Su progenitora siempre defendió que Mohamed estaba en Ceuta, ese jueves 13 de enero de 2022 le dijo a su madre que le recogería en el trabajo pero nunca apareció. “Estoy convencida de que algo ha pasado”, decía a este periódico la mujer, madre de 8 hijos.
Cuando a principios de este enero la madre de Mohamed Alí hablaba al cumplirse un año de su desaparición reconocía lo complicado de todos estos meses sin noticias. Ahora las labores se centran en intentar dar con el cuerpo.
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