Son los datos del
incendio. Los que se conocen de momento. Los ha dado el presidente de Ceuta,
Juan Vivas, a los medios de comunicación después de haberse perimetrado toda la zona del siniestro. En total han sido ocho las hectáreas calcinadas y todo apunta a que ha sido un hecho provocado. Es lo que asegura Vivas aunque la
Guardia Civil todavía no llega a este extremo. Si las condiciones atmosféricas siguen así, es decir el viento, temperatura y la humedad; se espera extinguir el fuego a las 20.00 horas. Es la aproximación más cercana que han hecho los
Bomberos, que no cesan en la vigilancia del terreno para que las llamas no se reaviven.Los desalojados: dos familias y los 17 menores de Punta Blanca, no volverán al lugar hasta esa hora. A primera hora de la tarde ya estaba controlado, según destacó la Ciudad, que pasó al nivel 0 de alerta de su Plan de Incendio Forestales. A esas horas se continuaba trabajando en las labores de mitigación del incendio forestal que evoluciona favorablemente y dentro del perímetro de control. 40 efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) continúan trabajando en la zona afectada. No hay daños personales, tan solo un vecino que se ha hecho un esguince, pero no hay que lamentar mayores incidencias a pesar de existir el temor inicial de que un residente hubiera desaparecido. Finalmente no hay nada que temer en este ámbito. El fuego, "probablemente intencionado" según Vivas, ha hecho un daño, de nuevo, en esta zona de alto valor ecológico. Será este miércoles cuando habrá que estudiar las consecuencias habidas, contando con el análisis del personal de Obimasa. No se espera el relevo de la UME, ni siquiera ha sido necesario activar, esta vez, el protocolo ya que los Bomberos han podido controlar la situación. Tampoco se han pedido más medios aéreos, contándose con el helicóptero del Ministerio, que estuvo operativo hasta aproximadamente las 17.00 horas, cuando regresaron a la base tras una intensa jornada de trabajo. A los Bomberos se les ha repartido hasta 100 bocadillos que ha llevado la entidad humanitaria de Cruz Roja para que puedan alimentarse mientras están al pie del cañón. La cafetería Las Balsas los ha preparado de la manera más rápida. Todo para luchar contra el fuego en un verano especialmente dañino para Ceuta y sobre todo para la zona de Calamocarro que ha sufrido dos grandes heridas de muerte en solo un mes.