CSIF, “el sindicato más representativo de la Administraciones Publicas y con presencia creciente en el sector privado”, ha felicitado este martes públicamente a Fernando Muñoz Borrego, un
enfermero del
Hospital Universitario de Ceuta que salvó la vida de un bebé en un Airbus A320 de la compañía Vueling cuando viajaba desde Galicia hacia Málaga. El profesional sanitario, que venía de hacer el Camino de Santiago junto a su pareja, se encontró con la
emergencia en el
vuelo que le traía de vuelta a Andalucía para regresar a la ciudad autónoma. Durante el trayecto el pequeño de 20 meses empezó a convulsionar, activando la tripulación el protocolo de sanitario en vuelo, al que respondió Muñoz, que ofreció sus servicios profesionales al rescate del pequeño. Tal y como ha detallado la central en un comunicado se declaró la emergencia en vuelo, desviándose este hacia el aeropuerto más próximo, que era el de Valladolid, en Castilla y León. Los pilotos, junto a la torre de control, realizaron la maniobra de aterrizaje de emergencia y, mientras, el enfermero caballa del clínico de Loma Colmenar, “con los escasos medios que le facilitaron en el vuelo”, estabilizó al pequeño y mantuvo la calma de los padres. CSIF ha querido “poner en valor los grandes profesionales sanitarios con los que contamos en nuestra ciudad” y “dar las gracias a la excelente actuación de Fernando Muñoz, enfermero del HUCE, por salvar la vida del pequeño”. Las autoridades calculan que en uno de cada 600 vuelos se produce una emergencia sanitaria, la mayoría ligadas a síntomas de síncope cercano y gastrointestinal, respiratorio y cardiovascular. Solamente en un 4,4% de los casos es necesario el aterrizaje de emergencia. Si algún sanitario forma parte del pasaje los protocolos apuntan que debe identificar sus antecedentes y habilidades, realizar una evaluación e informar al personal de asistencia médica en tierra a través de la tripulación de la aeronave.