Una ciudadana ha telefoneado esta madrugada de jueves al 112 de Ceuta para alertar de que su marido se encontraba en peligro por una caída en su domicilio y requería de ayuda para levantarlo del suelo. Un servicio del que no se ha hecho cargo nadie, ni Cruz Roja ni el 061, y que ha asumido Bomberos por humanidad como en ocasiones anteriores.
Este no es un caso aislado, como ya ha informado El Faro de Ceuta. Entonces, ¿a quién le corresponde prestar este auxilio? Al Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento no, pero la Consejería de Servicios Sociales tampoco se pronuncia sobre este particular más allá del anuncio de la licitación de la atención a personas en situaciones de emergencia.
Alguien debería de tomar cartas en este asunto ya que el envejecimiento de la población hace que cada vez sea mayor el colectivo que o no tiene a nadie que se ocupe de él o bien la persona a su cargo no puede atender todas sus necesidades, como es el caso de quienes son corpulentos y se resbalan, se caen de la cama o sufren otro accidente doméstico similar.
Quema de seis a siete contenedores en las últimas 24 horas
Al mismo tiempo, en el Príncipe Alfonso, se ha originado el enésimo fuego de contenedores y, para mayor gravedad, en dos zonas distintas de la barriada. Mientras unos bomberos terminaban la intervención en el domicilio del precipitado, otros se han desplazado hasta la calle San Daniel y la zona del zoco.
En la primera ubicación, han ardido varios depósitos de basura y, en la plaza Rafael Cervós en principio solo uno. Para adentrarse en el Príncipe con garantías de seguridad, los bomberos han sido escoltados por la Policía Nacional como no puede ser de otra manera y establecen los protocolos.
Sigue así la quema de contenedores en Ceuta. En las últimas 24 horas, el fuego ha devorado entre seis y siete aproximadamente ya que, este miércoles, también el SEIS registró otros tres incendios de este mobiliario urbano. Dos en Loma Margarita y un tercero en la parte trasera de Juan de Juanes. Todo a plena luz del día y en cualquier sitio, sin temor a ser descubiertos.
En el primero, en la misma Loma Margarita, ardió uno y, en los alrededores de Santa Amelia, otro en el que los testigos hablan de la presencia de menores y se desconoce si fueron interceptados por la Policía. El fuego de Juan de Juanes fue de rastrojos.
Si fuera entradas de menas y de subsaharianos, aparecen veinte ambulancias rápidamente de cruz roja, pero para atender a un señor mayor que se ha caído de la cama, ni aparecen.
Para Menas más de 4 millones pero luego se cae un abuelo o una abuela en su domicilio y tienen que acudir Bomberos y Policía Local.
Cruz Roja no está para estas cosas pero cuando hay un salto de valla se dan patadas en el culo, que lo veo mal evidentemente pero es inadmisible que dejen tirado a nuestros abuelos y abuelas, para mi Cruz Roja ha muerto.