El Tribunal de Jurado integrado por 9 personas y 2 suplentes ha sido conformado esta mañana en Ceuta para constituir esa suerte de entidad juzgadora no profesional que deberá dictar veredicto respecto del único acusado que aún no ha sido sentenciado por el crimen de Mohamed Alí.
Desde primera hora se ha procedido a la elección de los miembros de este tribunal estando presentes todas las partes: Fiscalía, Acusación Particular y la Defensa de Enrique L.A., mayor de edad, y acusado de asesinato.
Los dos menores que le acompañaban en la implicación de tan crueles hechos ya fueron condenados por la instancia correspondiente, el Juzgado de Menores, y cumplen medidas de internamiento.
En el caso de Soraya M.B. fue condenada a 6 años de internamiento, mientras que Ahmed A.O., a 8. Se les condenó por el asesinato de quien era su amigo, pero se les absolvió de los delitos de detención ilegal, contra la integridad moral, coacciones, amenazas condicionales, odio y profanación de cadáveres.
Confesión del crimen y veredicto motivado
Enrique L.A. ha sido conducido a primera hora de esta mañana a los calabozos de la Audiencia, en el edificio Ceuta Center. El joven confesó parcialmente el crimen, pero a pesar de ello el Jurado debe motivar adecuadamente el veredicto para, posteriormente, ser el magistrado ponente el que dicte la sentencia con la pena impuesta.
Es decir, la mera confesión lleva a que se descarte la declaración de varios testigos, pero el Jurado tiene que motivar adecuadamente por qué considera que esa persona es culpable de asesinato, aunque lo haya confesado parcialmente, o no es culpable.
Para el Ministerio Público y la Acusación Particular, que representa el abogado Marcos García Montes, no cabe duda de que el acusado cooperó con los menores Ahmed A.O. y Soraya M.B. para terminar con la vida de Mohamed Alí, que por aquel entonces era menor de edad y cuyos restos fueron encontrados en García Aldave después de que su familia estuviera meses y meses buscándolo.
Se utilizó el coche del acusado y en su maletero se guardó el bate empleado como arma homicida.
Un joven dominado
La Defensa de Enrique L.A. ha resaltado que su cliente sufre una discapacidad del 45%, presentándolo como alguien vulnerable y manipulable, sobre todo por la menor condenada que llegó a ser su novia.
Ha mantenido que nunca compartió ese plan de asesinar a Mohamed Alí sino que fue manipulado para que, siendo el único que tenía carné, pudiera llevarles.
Pasados los hechos, entró en pánico y si no colaboró hasta un año después fue porque temía que a él le hicieran lo mismo.
El crimen
El crimen fue cometido el 13 de enero de 2022 y pudo ser esclarecido gracias a una investigación de la Policía Nacional en donde fue clave la confesión de una de las menores y el ahora juzgado, quienes sí cooperaron en el esclarecimiento de los hechos, aunque bastante tiempo después.
Enrique L.A., junto a la menor, ofreció una confesión espontánea al ser detenido por la Policía tras una investigación de la Udyco que resultó bastante complicada debido a la cuantiosa información falsa facilitada, así como las trabas encontradas, lo que no hacía sino entorpecer el avance de las indagaciones policiales practicadas.
Un año después de la desaparición del joven, fueron detenidos los tres implicados realizándose una reconstrucción en el lugar del suceso. Asistidos por sus abogados, fueron conducidos hasta las inmediaciones de la Torre de la alquería del cortijo de Fuente de la Higuera, en Finca Serrano, en García Aldave.
Allí es donde ocurrió el crimen tras una agresión previa en el monte de la Tortuga y allí fue donde se localizaron los restos identificados con posterioridad como los del joven.
Un año de ocultación
Lo ocultaron durante algo más de un año. Dejaron que pasaran los meses, que una madre desesperada implorara colaboración, que se hicieran batidas para buscar a su amigo Mohamed Alí por toda Ceuta llegando incluso a participar en las mismas. Permitieron todo esto guardando el más cruel de los secretos.
Finalmente confesaron los hechos a unos amigos, y estos acudieron a la Policía a contarlo, lo que terminó por desbloquear las investigaciones policiales.
Se pudo reconstruir todo el crimen hasta terminar en esta fase actual, que es la de la resolución judicial. Solo queda que se conozca el fallo judicial para este adulto.
El Ministerio Fiscal solicita una pena de 25 años de prisión para el llamado Enrique L.A., el joven detenido en Ceuta en el marco de la investigación desarrollada por la UDYCO de la Policía Nacional para esclarecer el crimen de Mohamed Alí.
