Este martes el registro de casos por coronavirus en Ceuta sumó 34 positivos más, según se detalla en el último informe emitido por la Consejería de Sanidad de Ceuta. De ellos, se especifica, 22 se notificaron desde el Punto Covid de Loma Colmenar mientras que 9 fueron detectados a través de los centros de salud y/o el hospital de Ingesa. Aunque son 7 menos que en la jornada anterior, cuando se diagnosticaron 41 casos nuevos, la incidencia acumulada, revisando los datos de los últimos 14 días, sigue en aumento situándose, concretamente, en 375,97 casos por cada 100.000 habitantes. Además, el número de brotes detectados asciende ya a 30 y las personas en aislamiento son 332.
El dato positivo que sí continúa a la baja es el de la ocupación hospitalaria, pues una mujer de 87 años fue dada de alta y, al no haber nuevos ingresos, el total de hospitalizados a causa del virus baja y es ahora de 6 pacientes. Personas que se distribuyen de la siguiente manera: 1 en Observación de Urgencias y 5 en Planta. La UCI sigue libre de pacientes covid, lo más esperanzador.
Ingesa, transcurridos más de cuatro meses desde el inicio de la sexta ola (iniciada oficialmente el 10 de noviembre) ha hecho balance de esta última onda indicando que, hasta el 8 de marzo, Ceuta había registrado 11.457 casos confirmados en estos meses, de un total de 19.209 casos (a tiempo real), en toda la pandemia. Esto significa casi un 60%. En lo que respecta a los decesos, en estos últimos meses se han notificado 17 muertes del total de 146 que, a la fecha, registra la pandemia en Ceuta a causa del coronavirus.
Además, Medicina Preventiva recuerda que en los momentos más álgidos (en enero) se llegó a rebasar una incidencia de 6.300 casos por cada 100.000 habitantes, cifra que a día de hoy es mucho menor. Destaca, además, el alto número de reinfectados que se ha constatado, que cifra en 358 pacientes. Todo ello tras recordar que la expansión del covid-19 se produjo, en estos últimos meses, tras detectarse dos brotes de gran alcance: uno socio-religioso, tras la festividad del Diwali, y otro surgido en una residencia. Desde ahí el Puente de la Constitución y las fiestas navideñas provocaron, en poco tiempo, "un comportamiento explosivo similar al producido en Sudáfrica, y posteriormente en España".