No todas las gafas de sol son válidas para ponerse al volante, y el uso de modelos no homologados o inadecuados puede derivar en multas que alcanzan los 200 euros. COPE, cuya delegación territorial en Ceuta forma parte de Grupo Faro, se hace eco de esta advertencia en la que ha insistido la Dirección General de Tráfico (DGT).
Pese a que proteger los ojos del sol mientras se conduce debería ser tan habitual como colocarse el cinturón de seguridad, los datos revelan una realidad muy distinta. Alfonso García, conocido como 'Motorman' y especialista del mundo del motor en el programa 'Poniendo las Calles' de COPE, lo explicó con claridad: “Casi la mitad de los conductores españoles no usa gafas de sol mientras conduce”.
Esta falta de hábito es preocupante, especialmente porque las gafas con lentes polarizadas están altamente recomendadas por los expertos en salud ocular y por las propias autoridades de tráfico. La cuestión fue planteada por un oyente del espacio radiofónico, Álvaro, desde Logroño, interesado en saber cuál era la mejor opción para quienes pasan largas horas al volante.
Algunas gafas de sol están expresamente prohibidas
La respuesta fue rotunda. “Las gafas con lentes polarizadas son las más idóneas, ya que este tipo de filtro evita los reflejos que reducen la calidad de la visión y, además, disminuyen los destellos”, subrayó Motorman durante su intervención.
Ahora bien, no todas las gafas de sol son apropiadas para la conducción, y algunas están expresamente prohibidas. La DGT advierte que ciertos tipos de lentes, como las clasificadas en la categoría 4, no deben usarse en carretera. Estas gafas tienen una lente extremadamente oscura, pensada para deportes como el esquí o las actividades náuticas, pero jamás para circular con ellas por la vía pública. “Su uso está prohibido para conducir y es sancionable”, recalcó el experto.

Más allá de la norma, el uso de gafas no adecuadas puede comprometer la seguridad del conductor y de quienes comparten la vía. Estas lentes pueden disminuir la visibilidad, dificultar la percepción de cambios de contraste y aumentar el riesgo de colisión, sobre todo en momentos críticos como la entrada a un túnel o en trayectos con cambios bruscos de luz.
También generan controversia las gafas fotocromáticas, que se adaptan a la intensidad de la luz solar oscureciéndose automáticamente. Aunque en apariencia parecen una solución práctica, su uso al volante no es recomendable, especialmente durante el anochecer o en situaciones de escasa luminosidad.
Llevar las lentes prescritas no es opcional, sino una obligación legal
Y hay más: si un conductor necesita gafas graduadas y decide ponerse unas sin corrección visual, la sanción también puede imponerse. Llevar las lentes prescritas no es opcional, sino una obligación legal.
Otro aspecto fundamental es el color de la lente. Según indicó Motorman, “las gafas de sol más recomendables para conducir son las grises o ligeramente azuladas, con un nivel de filtro 2 o 3”. Este tipo de tonalidad proporciona una protección adecuada sin oscurecer en exceso el entorno, permitiendo al conductor mantener una percepción clara y precisa de lo que ocurre en la carretera.
Acude a un centro especializado
Además de evitar multas, usar unas gafas apropiadas protege la salud de los ojos y contribuye a una conducción más segura. La recomendación de la DGT y de los profesionales del sector óptico es clara: antes de salir a la carretera, acude a un centro especializado, infórmate sobre las características técnicas de tus gafas y asegúrate de que cumplen con la normativa vigente.
Como recuerda la Dirección General de Tráfico, un pequeño descuido al elegir unas gafas puede convertirse en un riesgo mayor para la seguridad de todos.






