El titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta condenó al llamado T.M.A. por un delito continuado de estafa.
El acusado reconoció los hechos y aceptó la pena de 1 año y 10 meses prisión así como el pago de una multa de 2.791, 42 euros en concepto de responsabilidad civil.
Entre los días 3 y 4 de marzo de 2022, el acusado -que trabajaba para la empresa Servilimpsa- actuando en su nombre y sin estar autorizado para ello, realizó un contrato de alquiler con una empresa de maquinaria consistente en una pulimentadora rotativa valorada en 395 euros e hidro limpiadora valorada en 446 euros, apropiándose de la misma y causando a su empresa un perjuicio económico de 841 euros.
Igualmente, en fecha y hora indeterminadas pero en todo caso comprendidas en ese mes de marzo de 2022, el acusado realizó un contrato de compraventa con la empresa Baeza SL de maquinaria consistente en Aspiradora Karchar ED Premium e hidro limpiadora, apropiándose con evidente ánimo de lucro de la maquinaria y causando a Servilimpsa un perjuicio económico de 827,35 euros.
Con idéntico ánimo de lucro y sin estar autorizado para ello, el ahora condenado empleó de forma continuada una tarjeta de repostaje de combustible de titularidad de la empresa con la finalidad de repostar gasolina en diferentes vehículos pertenecientes a terceras personas haciéndoles creer que tenía un bono de descuento en gasolineras y realizando los siguientes cargos en la tarjera de la empresa.
En la estación de servicio ON365, el 1 de marzo del año pasado sobre las 12:23 horas hizo un repostaje de 38 euros. Minutos más tarde y sobre otro vehículo hizo un repostaje de 32,45 euros.
Horas más tarde, el acusado se personó en la misma gasolinera con otro vehículo e hizo un repostaje de 51 euros.
Un día después, sobre las 16:40 horas, volvió a repostar con otro coche por un importe de 52 euros. Ya por la noche, con otro vehículo, hizo las mismas labores por un importe de 37 euros.
En días posteriores, y en la misma gasolinera, el acusado hizo múltiples repostajes con distintas cantidades y en todos ellos llevó a cabo el pago con la tarjeta de la empresa.
Todos estos servicio para los cuales no contaba con la autorización de la empresa causaron un perjuicio total de 1.123 euros.
El mundo está lleno de tontos
Hay que ser cenutrio......