El acusado, de origen argelino quiso obligar a la víctima a que se despojara de la ropa
Sin la comparecencia del acusado, se celebró ayer, en el Juzgado de lo Penal número 1, el juicio contra T.G. por un delito de agresión sexual y otro de lesiones leves por el que ya se había conformado, según se estableció en el Juzgado de Instrucción.
Por el primero de los hechos, deberá cumplir seis meses de prisión, mientras que por el segundo se le impuso un año de libertad vigilada, así como la prohibición de acercarse a la víctima a una distancia de 100 metros durante un periodo de año y medio.
Deberá pagar, además, una multa de 150 euros. De origen argelino, T.G. se encontraba en las inmediaciones de la playa Benítez, el pasado 2 de abril, cuando agarró por el cuello a C.N. y, con ánimo libidinoso, le retorció el brazo exigiéndole que se despojara de la ropa, sin conseguir su propósito gracias a la intervención de terceras personas, que intervinieron para impedir la agresión.
Como consecuencia de estos hechos, la víctima sufrió erosión en la región cervical y un hematoma en la mano derecha, que tardaron diez días en sanar.