El 10 de septiembre de 2023, agentes del Servicio Marítimo de la
Guardia Civil colocaban las esposas al
marroquí Jamal A.B. Lo habían sorprendido con dos inmigrantes a bordo de la moto de agua que pilotaba intentando alcanzar la Península. Ahora, seis meses después, la
Audiencia de Ceuta lo
condena a 2 años de cárcel. El acusado, que fue conducido por agentes de la Policía Nacional ante el tribunal de la Sección VI, reconoció la comisión del delito tras haber permanecido desde su arresto en una celda de la
cárcel de Mendizábal. Confesó que en la mañana de ese 10 de septiembre pilotaba una moto de agua modelo Yamaha con la que había partido desde Marruecos. A bordo llevaba a dos marroquíes a sabiendas de que no tenían autorización para entrar en España, la idea era pasarlos de manera irregular. La Guardia Civil detectó el pase gracias a la coordinación de las distintas unidades a través de la central COS, procediendo a la localización de la moto de agua a 10 millas náuticas de Punta Almina en dirección a las playas de La Línea.
Jamal intentó escapar sin éxito y terminó esposado por los agentes de servicio, quienes además pudieron identificar a los dos inmigrantes.
La moto usada para el delito, intervenida
El tribunal del máximo órgano judicial en nuestra ciudad impuso una condena de 2 años de cárcel después de un acuerdo entre el Ministerio Fiscal y la Defensa que pasó por el reconocimiento por parte del acusado de la comisión de este delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. La pena de prisión queda en suspenso durante un periodo de dos años en el que, de cometer algún delito, el acusado deberá entrar en prisión. La Sala acordó también la intervención de la moto náutica empleada para este tráfico de personas que pasará a ser controlada por la administración. Por esta causa se ordenó su puesta en libertad. El día en el que la Benemérita detuvo al ahora condenado arrestó a otro pasador de inmigrantes en moto de agua.