La titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta ha condenado a una mujer llamada G.R.S. que estaba acusada inicialmente por un delito de atentado e incitación al odio cometida contra una médico del centro de salud del Recinto. La figura jurídica de la conformidad ha evitado la celebración del juicio señalado este lunes, después de que la acusada se haya conformado con un delito de atentado retirándose el de incitación al odio.
La pena acordada entre Fiscalía y Defensa con el beneplácito de la Acusación Particular ha sido de seis meses de prisión que la acusada no deberá cumplir al carecer de antecedentes penales. Ni la Acusación Pública ni la letrada de la Particular se han opuesto a ello. La magistrada del Penal 1 ha dictado sentencia de conformidad.
La conformidad se ha podido llevar a cabo no sin algún que otro problema a través de videollamada, ya que la acusada se encontraba en la Península.
Los hechos se produjeron en octubre de 2017, en el ambulatorio del Recinto, cuando la acusada mantuvo un enfrentamiento con una médico de este centro sanitario a la que insultó e intentó agredir, algo que no llegó a producir por la mediación de otra persona. Por el contenido de los insultos vertidos, de tono despreciativo, de había incluido en la calificación inicial un delito de incitación al odio que se ha retirado.
Esta sentencia se enmarca en la hilera de casos en los que profesionales médicos terminan siendo menospreciados o sufren intentos de agresión por parte de usuarios. Una situación que ha llevado a cuantiosas protestas por parte del Colegio de Médicos pero no ya por situaciones concretas, ocurridas en un espacio físico sino también en el ámbito virtual.
Precisamente es en el ámbito de las redes sociales donde más contenidos atentatorios y vinculados al alentamiento al odio se producen, generando un clima de inseguridad y desasosiego entre los sanitarios.
A esta gente la ponía a tener que pagarse el 100% de la asistencia y tratamientos médicos, que recibieran durante un tiempo, entonces si que lo iban a sentir.
Se creen con derecho a abusar de los servicios de los que gozamos, y que todos intentamos mantener con dignidad y respeto.
Pero al final la condena se queda en nada para el agresor, y en un martirio para la víctima.
¡¡CONDENAS CONTUNDENTES Y EJEMPLARES YA!!
¡¡NO SE DEBEN SEGUIR TOLERANDO ESTE TIPO DE HECHOS!!
Hay que poner penas ejemplares y dejarse ya de paños calientes!!! Pero eso en este país de pandereta es imposible!!! .......
Y sanción economica, tampoco
Con 3.000€ de sanción, se lo pensará la próxima vez.