Abdelilah Hamoudan, uno de los menores acogidos en el Centro de Realojo Temporal La Esperanza de Ceuta, ha sido el ganador del primer Concurso de Relatos Cortos de la Fundación SAMU, la entidad que gestiona parte de esa instalación. Se trata de un relato cargado de fuerza en el que este adolescente cuenta cómo llegó a España desde Marruecos.
El director general del Grupo SAMU, Carlos González de Escalada, ha felicitado a través de sus redes sociales a Abdelilah Hamoudan por su participación y por haberse hecho con el certamen a través de una redacción titulada ‘El día que mi vida cambió’. Este menor, acogido en el centro ‘La Esperanza’ del barrio ceutí de Hadú, recibirá como premio dos entradas para el Parque Marítimo del Mediterráneo. El ganador del segundo premio recibirá dos entradas de cine y el tercero, un estuche de perfume.
El relato escrito a mano, que ha sido compartido por el presidente de SAMU, explica lo siguiente:
“Un día como otro cualquier me levanté temprano porque habría quedado con mis amigos en pasar el día en la playa de Beliounech. Salimos desde Tánger con las motos y paras en Ksar Sghir para desayunar. Mientras desayunábamos un amigo vio un directo en su teléfono en el que se veía gente entrando a Ceuta sin restricciones. Decidimos hacerlo nosotros también ya que era nuestro sueño ir a España.
En el camino mi amigo y yo tuvimos un accidente con la moto porque íbamos con mucha velocidad, a mí no m pasó nada grave, sólo una herida en la pierna, pero mi amigo resultó herido. Al estar en carretera un hombre lo llevó en su coche al hospital del pueblo pero luego fue trasladado al hospital de Castillejos en ambulancia porque ahí no podía ser atendido. El resto de amigos continuamos hasta Ceuta por la parte de Beliounech.
Entramos nadado hasta la cafetería de Benzú, una vez dentro nos ayudó la Cruz Roja, a mis amigos los llevaron a las naves y a mí al hospital debido al estado de la herida que me hice en el accidente y la hipotermia. Después de eso nos llevaron a un centro de menores, en el que aún sigo hasta el día de hoy.
He estudiado alfabetización en Piniers, luego hice un curso de cocina, un curso de billar y un curso de camarero del cual pronto empezaré las prácticas. En general estoy bien y agradezco seguir con vida después de aquel accidente, por lo que aconsejo a todos los chicos que usen protección con los cascos y no conduzcan sobrepasando los límites de velocidad”.
Lleva la gubia en su mano desde que tiene 13 años. Manuel sabe cómo hacer…
Marruecos avanzó a las semifinales del Mundial de la Kings League tras una emocionante remontada…
El comité de empresa y la patronal, en este caso Servilimpce, continúan trabajando de forma…
El Círculo de Silencio Ceuta no ha faltado a su cita del segundo miércoles del…
El camión con mercancía que había cruzado la frontera del Tarajal que separa Ceuta de…
La familia del marroquí de 22 años Saad Ouasif busca desesperadamente al joven después de…