Tras la peregrinación, misa y procesión tocaba pasárselo bien comiendo, bebiendo y bailando. Los romeros se hicieron con los alrededores de la ermita de San Antonio, en el Monte Hacho, y pudieron disfrutar de la música y de un rato muy especial en Ceuta rodeados de su gente en la esperada romería.
Se contaba con servicios de Protección Civil y una ambulancia por la seguridad de la gente que asistió. En cuanto a los servicios, se instaló una barra en la que además de servir gratis una paella riquísima, también ofertaban bebidas y comida para satisfacer las necesidades de los asistentes. Una barra que estaba llena de gente riendo, conversando y bailando.
Todo el mundo asistió pensando en el arroz gratis que se ofrece a los romeros, y aunque haya que hacer cola, merece la pena esperar para probar ese manjar que incluía gambas y guisantes.
El nombre de una de las prodigiosas manos que hicieron el arroz es Ana Batista. “Dicen que ha salido buenísimo. La gente dice que huele muy bien y yo les he dicho que eso es porque se le echan muy buenos ingredientes. El sofrito es buenísimo. Me está dando hasta tiempo de bailar para mover las piernas y que no me duelan”, dijo entre risas.
Se hicieron un total de 30 kilos de arroz para los romeros.
No podía faltar quien probara el arroz y compartiera su opinión, y de ello se han encargado Rocío Toledo y Adrián Jiménez. “Buenísimo está”. “Está, aunque suene fea la palabra, de puta madre”.
Charo Fernández recalcó que se estaba “muy bien, perfectamente, me gusta. Esto está muy bien para los jóvenes. Porque, aunque sea mayor, me siento joven”. Le pedimos si podía bailar para El Faro de Ceuta y no se lo pensó ni un segundo, activó el ritmo y nos dedicó unos bailes.
Encontramos a Javi García, hermano de la Flagelación, rodeado de una mesa de dulces, ahí nos faltaba algo de comida mediterránea, y claro, nos contó que “hemos comido montaditos de carne picada con gaucha, jamón, queso, embutido… Y las dos o tres tortillas que traíamos han caído rápido, y una literalmente se ha caído porque la ha tirado uno de los que vienen conmigo al suelo, así que hemos pasado a los dulcecitos”.
Además, portaba un sombrero muy propio de una romería, con el que lleva ya más de diez o doce años ya que viene muy bien para la romería de San Antonio.
De lejos unas chicas muy animadas bailaban con mucha energía. Eran Lydia Martínez y Martina Hoyo. Nos contaron que se lo estaban pasando muy bien y que “se disfruta un montón” y que, aunque preferían flamenquito, llega una hora en la que se baila todo”, el ritmo y la alegría no les faltaba a estas simpáticas jóvenes vestidas de romeras.
Julia Castillo, una niña adorable con un conejito negro cogido en brazos, también quiso contarnos cómo se lo estaba pasando y cómo era que tenía un conejo en brazos. “Siempre lo llevo a todos lados, no se me escapa. Se llama Tonejo”. Julia contó que también baila con él y que se lo estaba pasando muy bien”.
Gema Perea resaltó que “para nosotros es tradición. Subimos todos los años desde que soy pequeña. Yo subía con mi abuelo y se lo estoy inculcando a mis hijos”. En cuanto a la comida ha contado que trajeron bocadillos de casa y pidieron tortitas de camarones.
Las quejas por los autobuses
“Lo único malo ha sido el tema de los autobuses. Hemos estado esperando dos horas. Todos los años hemos venido en autobús y nunca hemos tenido problemas. Muchas personas mayores al sol se han tenido que ir, otras veían que llegaban las doce y que no iban a llegar a la misa y han decidido irse a sus casas. Es la única parte negativa, porque San Antonio siempre es un acierto y yo lo recomiendo mucho. La playa está todo el verano y San Antonio solo es un día”.
Los niños también se lo pasaron muy bien, como Raúl Tierra que dijo estar “flipando con la gente que hay. De comida han puesto arroz, yo me he comido el pan que estaba muy rico y el ambiente es muy bonito, el lugar es precioso, es increíble”.
Y también están los que prefieren comer y reírse y no tanto bailar, es el caso de Óscar Álvarez: “Comiendo sí, bailando poco, no me gusta bailar. He venido con mi familia y le estoy haciendo bromitas con mi prima”.
La pareja Ana María Galán y Alejandro Javier Paredes contaron que habían venido en coche desde el barrio y que habían aparcado por detrás y llegado andando hasta la ermita como exigía el protocolo. “Paseando por la naturaleza, que sienta muy bien. El ambiente aquí es un ambiente familiar. Mires para donde mires, ves vecinos, amigos, un clima muy bueno y un fresquito que se agradece bastante”.
También han confesado que “de momento llevamos una cervecita sin alcohol pero que un mojito tiene que caer. Creo que no hay peligro de que nos caigamos montaña abajo”, dijo entre risas y con actitud bromista.
Y algo faltaba, un brindis en honor de San Antonio, ¿no? Julio Tamayo, Abel Borrego y Néstor Rodríguez dedicaron a El Faro de Ceuta un brindis muy alegre en honor de su patrón popular.
Como vemos, no ha faltado de nada en esta romería de San Antonio. Buen ambiente, buena música, una comida riquísima, mucha alegría y muchos bailes.
El concierto de Raúle
Y tras el arroz, sobre las cuatro de la tarde, desde Jerez llegaba Raúle para amenizar la tarde a los romeros. El artista dijo haber pasado dos días en Ceuta y que le había gustado como para empadronarse en la ciudad.
La gente esperaba impaciente su actuación. Había varios fans que lo siguen, y no es de extrañar. Trajo un buen ambiente y puso a todos a mover el esqueleto con ese flamenquito que pide el cuerpo en romería.
Si no, que se lo pregunten a Vanesa Pérez, fan número 1 de Raúle. “A mí me encanta la verdad, soy muy fan. Estuve buscando para ir a su concierto y no había nada. Me chifla. Estoy cantando a puro pulmón. Recomiendo a la gente que lo siga y lo escuche porque es un artista. Me encanta. Mi canción favorita es la habitación prohibida”.
Las amigas Isa García y Carmen de los Santos confesaron que habían asistido expresamente para ver a Raúle. “Estábamos en la playa y nos hemos subido solo para verlo. Nos encanta. Nos gustan muchas de sus canciones, sobre todo Zurdo, en la cama, AVI… nos gustan todas. Aunque la nuestra, la que nos dedicamos como amigas es ‘colega antibalas’ siempre que nos felicitamos el cumpleaños, nos dedicamos esa canción. Desde que nos enteramos a través de El Faro de Ceuta de que venía, sabíamos que teníamos que verlo”.
La pareja Carlos Román y Beatriz Martínez reconocieron que, aunque no sabían de Raúle, disfrutaron mucho y afirmaron que “tiene un rollito muy bueno de flamenquito que es lo que nos gusta a nosotros”.
´Mi canija´, ´Yo quiero una vida contigo´, ´La habitación prohibida´, ´Cruje la cama’, ‘AVI, ´Corazón de cemento´ o ´Como no te voy a querer´ son algunas de las canciones que presentó en el escenario.
La fan Nicoll Domínguez profundizó en la canción ‘Como no te voy a querer´ y quiso explicar el significado del tema. “Va de las cosas bonitas de las personas. De cómo no querer a esa persona especial para ti. Te hace ver el lado en el que no te fijarías en alguien de primeras o aquello a lo que no damos importancia, las pequeñas cosas”, concluyó.
Un ambiente de fiesta familiar y amigos, con motivo de San Antonio, animado por la música de Raúle. Si había alguien que no lo conocía o no escuchaba su música, seguro que a partir de ahora lo hará. Pues ha dejado el listón muy alto y ha hecho que todos los romeros disfrutaran de un rato inigualable.