El Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) mantiene en la resolución por la que se ha establecido el calendario escolar para el próximo curso en Ceuta la posibilidad de que los colegios finiquiten la actividad lectiva en septiembre y junio a la una de la tarde, costumbre que enfrentó a las federaciones de asociaciones de madres y padres de alumnos.
La Dirección General de Planificación y Gestión Educativa mantiene que en el año académico 2023-2024 “durante los meses de junio y septiembre se podrá establecer, en Educación Infantil y Primaria, la jornada reducida de 9.00 a 13.00 horas”, una decisión que corresponde a cada colegio dentro de su autonomía.
En la ciudad autónoma las clases comenzarán en septiembre el jueves 7 en los colegios, Secundaria y Bachillerato. Terminarán el viernes 21 de junio.
La FAMPA Cuatro Culturas pidió a la Dirección Provincial en junio que acabase con esa jornada reducida y a la administración le resultó una propuesta “muy razonable para conciliar la vida laboral y familiar frente a la que no se encuentran argumentos sólidos que justifiquen la permanencia de dicho horario reducido”.
Sí los encontró la FAMPA, que se opuso inmediatamente: “Se trata de una medida adoptada única exclusivamente atendiendo al interés del alumnado, que no afecta en absoluto al horario del profesorado y con la que se pretende que el alumnado no sufra en exceso los rigores del calor que afecta de manera muy negativa a las condiciones en las que tienen que desarrolla un trabajo intelectual”, alegó.
“Nuestra obligación como padres y madres de alumnos”, se posicionó la federación que lidera Mohamed Ali, “es procurar la mejor educación para nuestros hijos, no la mayor comodidad para nosotros porque alguien tenga dificultad para aparcar a sus niños y entiende que es mejor que se queden en el cole”.