La
Ciudad Autónoma de Ceuta espera poner coto en 2023 a su gasto en
horas extraordinarias, sobre el que tiene puesta la lupa el
Tribunal de Cuentas. El proyecto de Presupuestos de la administración local para el próximo ejercicio que se prevé llevar a
Pleno el 23 de diciembre para su aprobación definitiva solamente asigna 500.000 euros a esa partida, apenas el doble de lo que se ha consumido este año solamente en agosto y septiembre. El
Consejo de Gobierno ha aprobado este viernes a propuesta de la consejera de Hacienda, Kissy Chandiramani, un
gasto en horas extraordinarias de distintos servicios de la Ciudad en esos dos meses de 249.826 euros que, según el portavoz del Ejecutivo, han ido fundamentalmente a funcionarios de la Policía Local, el Cuerpo de Bomberos, el Área de Menores “y otras materias que son propias de la Ciudad”. Según el último balance de ejecución presupuestaria de la Intervención, hasta finales de octubre del presidente año se había desembolsado de manera efectiva en gratificaciones y horas extra a la plantilla de la administración un total de casi 452.000 euros. Según el último informe del Tribunal de Cuentas, correspondiente al ejercicio 2019, en ese año “el 51%” de los funcionarios de la administración local recibió “gratificaciones” por la realización de ‘horas extra’ cuya retribución “se realizó de forma periódica en el tiempo y fija en cuantía”, contraviniendo la ley de Reforma de la Función Pública. En total se desembolsaron 1,1 millones, algo más de lo presupuestado para 2022 (un millón). Por ello la Sección de Enjuiciamiento del órgano de fiscalización quiere “verificar su realización o no con independencia de otras circunstancias, por lo que en la cumplimentación del requerimiento habrán de participar los órganos competentes que autorizaron la prestación de tales servicios y se aseguraron de su realización”.