En relación con las críticas del sindicato
CSIF respecto a
la labor de los coordinadores COVID de los centros educativos, la Consejería de
Sanidad, Consumo y Gobernación de Ceuta quiere desmentir que estos coordinadores ejerzan o vayan a ejercer funciones de
rastreo o similares.
La Consejería matiza que, desde que comenzó el curso escolar, e incluso antes, el Servicio de Epidemiología ha venido realizando tareas de apoyo para el Ministerio de Educación, tanto para el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales como para los propios centros. Esta labor de apoyo se ha realizado de manera transitoria, y mientras el Ministerio de Educación reforzaba la plantilla de los centros, en aras de la colaboración institucional.
Debido a la negativa evolución de la pandemia y al afloramiento de numerosos casos en los últimos días, la Consejería ha determinado que, desde el pasado jueves sean los coordinadores COVID los que se encarguen de comunicarse con los miembros de la comunidad educativa (profesores, PAS o alumnos) que sean contactos de un caso positivo y enviarles un correo electrónico con las instrucciones de aislamiento que marcan las autoridades sanitarias.
En ningún caso esta tarea se asemeja o equivale a un rastreo, puesto que esos contactos estrechos son localizados previamente por la Consejería, que también determina el periodo de aislamiento. Ese listado de contactos se comunica al coordinador COVID, cuya tarea será llamar por teléfono a los afectados y darles las indicaciones oportunas.
Se trata además de una actuación que viene recogida en el protocolo para centros educativos que se consensuó con motivo del inicio del curso escolar entre Consejería y Dirección Provincial de Educación en Ceuta. En un comunicado de prensa remitido este viernes, el sindicato CSIF exigió que sea el personal sanitario y no el docente quien ejerza como rastreador, en concreto, los coordinadores COVID de los centros educativos.