El invierno está a la vuelta de la esquina en Ceuta y costumbres como la de tomar un chocolate caliente con churros se antojan irresistibles. Un plan con mucho sabor del que estos días se puede disfrutar en las instalaciones de Chocolatería ‘La Perla’, abierta en el Paseo de la Marina hasta el próximo 31 de enero de nueve de la mañana a diez de la noche.
Daniel Sánchez Piñero, propietario de Chocolatería ‘La Perla’ explica que ya es el tercer año que abren en estas fechas en la Marina para ofrecer sus tradicionales churros con chocolate, además de otras propuestas como buñuelos, gofres, churros rellenos, bañados en chocolate y un largo y delicioso etcétera.
Las opciones para los más golosos son muchas en esta chocolatería aunque, según su propietario, existe un combinado que es el producto estrella, sobre todo, para estos días que más aprieta el frío: los churros con chocolate caliente. No obstante, explica que la gente más joven también gusta de probar otras elaboraciones como los churros bañados en nutella, perfectos para los amantes de los sabores más dulces.
Un variado surtido de opciones que hacen las delicias de pequeños y mayores por ser productos hechos de manera artesanal en el momento y con el cariño propio de un establecimiento con mucha solera en la ciudad. “La masa es artesanal, al igual que los rellenos y todas la elaboraciones de las que hacemos nuestra propia masa con nuestra propia receta que es, sin duda, la base de nuestro éxito, pero que no podemos revelar porque como decía el famoso eslogan publicitario; el secreto está en la masa”, comenta el dueño del establecimiento.
Un secreto con el que llevan años elaborando las mejores y más dulces propuestas que, desde el pasado año, además, también reparten a domicilio con gran éxito por ser un plan muy demandado por aquellos a los que les gusta tomarlos en casa.
Aunque durante todo el día hay gente que se anima a pasarse por el puesto para entrar en calor con unos churros o unos buñuelos, es a la hora de la merienda cuando más afluencia de público se da. Y es que, a pesar de la pandemia, la gente no renuncia a este dulce manjar aunque, eso sí: con mascarilla.
Un plan irresistible del que disfrutan clientes de todas las edades, como Manar e Hidaya Said Mohamed que, a pesar de ser pequeñas tienen claro que lo que más les gusta son los buñuelos bañados en chocolate blanco. Sandra Pacheco, por su parte, explica que es la primera vez que se acerca a probarlos, estando segura con solo percibir el aroma que envuelve la calle de que estarán buenísimos. Algo, que constata Carmen Blanco, quien cada año visita la chocolatería “porque están realmente buenos y con este frío apetecen mucho”.