Un año más, la Asociación de Discapacitados de Enfermedades Neurológicas y Enfermedades Raras de Ceuta, Aden, está celebrando su campamento de ocio y tiempo libre inclusivo en el que están participando entre 25 y 30 niños. Algunos de ellos son usuarios o familiares de usuarios, aunque también los hay de fuera.
Esta actividad, que alcanza ya su décima edición, se desarrolla a lo largo de todo el mes de julio de lunes a jueves. Durante este tiempo, los niños, de entre 4 y 12 años, disfrutan de diversas actividades y están “muy contentos”, tal y como asegura Ana García, presidenta de la asociación.
Y es que, “en el campamento hacemos actividades de todo tipo. Deportivas, como el baloncesto y el fútbol; acuáticas y vamos a la playa, también la semana pasada colaboró con nosotros la empresa Water Games Educa e hicimos kayak, bicicletas acuáticas y pádel; y manualidades en la asociación. Intentamos que a lo largo de este mes toquen todos los palos”.
Aún así, además de divertirse, este campamento también tiene otro objetivo claro: “Que los que tienen diferentes capacidades, puedan pasar un verano como cualquier niño”, añade la presidenta.
Así, este lunes ha tocado jugar al baloncesto inclusivo en el pabellón Antonio Campoamor. Una actividad para la cual han contado con la colaboración de la Federación de Baloncesto de Ceuta y que pretendía “acercar el baloncesto a todo el mundo y que los niños con o sin discapacidad puedan practicarlo juntos”, ha explicado Macarena Berruezo, fisioterapeuta de Aden y miembro de la junta directiva de la Federación de Baloncesto.
En ese sentido, ha detallado que esta jornada ha contado con la participación no solo de los niños del campamento de Aden, si no también de usuarios de Apascide, Acepas y Proi.
Con todos ellos divirtiéndose juntos, “Borja, que es el director técnico de la Federación, es el que está llevando a cabo la actividad para acercarla a todo el mundo y que vean que es un deporte inclusivo que lo pueden practicar tengan la edad que tengan y la capacidad que tengan”.
Uno de los chicos que estaba participando es Manuel Castillo, quien ha ido con la asociación Apascide. Ha contado que el baloncesto inclusivo consiste en “botar la pelota, cogerla y hacer mucho deporte. Me encanta. Yo estoy aquí trabajando con todo el equipo y estoy para ayudar a todas las personas”.
De este modo, los usuarios del campamento de Aden han podido jugar al baloncesto inclusivo con miembros de otras asociaciones. Una actividad con la que fomentan la actividad física y “que conozcan todos los deportes”, así como las relaciones sociales.